𝐁𝐈𝐑𝐋𝐄𝐌'𝐒 𝐁𝐀𝐁𝐘 ━ Joey Birlem.

━━ FIFTY-SEVEN; oh shit, here we go again.

Capítulo 57; ¡Oh mierda, aquí vamos otra vez!

rachel maloley.
CAPÍTULO FINAL.

              

                 — MIERDA, MIERDA, MIERDA...—RECITABA, MIENTRAS caminaba por el baño nerviosa

— Mi amor, ¿Puedes tranquilizarte?—dice Joey, sentando en el borde de la bañera, lo mire mal.

— ¿Que me tranquilice? ¿Quieres que me tranquilice?—estaba histérica, eso era obvio—. Joey, mi periodo no ha llegado en cinco semanas.

— La doctora dijo que después de dar a luz es normal que se te vaya el periodo—recuerda, sin importancia.

— Di a luz hace casi tres meses, Joseph—le recordé, en tono incrédulo—. No debería retrasarme más, mi cuerpo está normal otra vez.

Joey pareció pensarlo de nuevo—. Oh, entonces estamos jodidos.

Lo mire mal, mientras veía el reloj en el baño, habían pasado dos minutos desde que me hice la prueba de embarazo. Aún faltaban tres minutos y Joey con sus comentarios idiotas solo me ponía más nerviosa.

— Dios mío, Joey, ¿Que vamos a hacer?—jale mi cabello—. Matt tiene tres jodidos meses de nacido.

— Okay, cálmate..—se levanta, y me toma por la cintura—. Hagamos cuentas, cuando esté bebé nazca él ya tendrá un año.

— No me ayudas en lo absoluto—admití, con una sonrisa falsa. Joey hizo una mueca.

— Sinceramente estoy jodidamente nervioso justo ahora—confiesa, con la mueca inerte—. Apenas y podemos con un bebé.

Lo mire incrédula, ¿Que si apenas y podíamos? Eso era obvio, aún teníamos algunas peleas muy estúpidas por quién cambiará al bebé. Aún no decidimos quiénes serán los padrinos de Matthew y con otro bebé solo se multiplicarán todos los problemas.

— Dios, dios, dios...—susurre, recargando mi frente en su pecho—. Si estoy embarazada, Payton va a matarnos.

— ¿En qué momento pasó de ser nuestro hijo adolescente a nuestro padre?—pregunto, en tono divertido, abrazando mi cintura.

— No tengo idea—encogí mis hombros, abrazando su espalda—. Desde que Matt nació no tengo idea de muchas cosas.

El pecho de Joey vibro por su risa, sonreí. Apesar de las circunstancias, él estaba aquí, y era lo único que necesitaba.

— Si me gustaría otro bebé...—admite, en un susurró—. Así podré estar desde el principio y no a mitad del embarazo.

— Yo también quiero otro hijo, Joe...—le susurré de vuelta, sentí sus labios en mi hombro—. Pero no ahora, tal vez en uno o dos años.

— Lo sé, lo entiendo...—estaba dejando besos por todo mi cuello, hasta lentamente llegar a mis labios.

Antes de besar mis labios lo mire incrédula, por esto es que estamos en esta situación ahora.

No pareció importarle mi mirada de reproche, porque tomo mis piernas y me subió a su cadera, caminando lentamente al lavabo, sentándome ahí. Beso mis labios de manera lenta, al mismo tiempo que metía sus manos por mi falda. Sabía que era mala idea ponerme falda con él en sus días de hormonas.

— Joey...—susurre entre besos, solo recibí un quejido de su parte—. Esto es lo que nos trajo a este problema.

— ¿Besarnos en el baño?—pregunto, haciéndose el tonto.

— De echo, a Matt lo empezamos a procrear en el baño del departamento pasado—le recordé, él sonrió.

— Inauguremos este baño, entonces...

Ignoró por completo el echo de que en un minuto tendríamos el resultado de la prueba de embarazo, y levanto mi blusa, comenzando a besar mis pechos.

Por un segundo olvidé porque estábamos en ese baño, hasta que vi el reloj en la pared de reojo y note que ya habían pasado 10 minutos.

— Joey, Joey...—lo detuve, poniendo mis manos en su pecho—. Ya está la prueba.

Me miro con un puchero, alce una ceja y con el puchero inerte abrochó su pantalón y acomodó mi falda.

— Gracias.

Me miro mal, pero aún así dejo un beso en mi frente

— ¿Podemos hacer esto rápido? Me duele—se quejo, lo mire mal, pero encogí mis hombros.

— Está bien, pero solo porque en serio quiero saber.

Me pare frente a la prueba, sentí los brazos de Joey abrazarme por la cintura, dejo un beso en mi cabeza e ignorando por completo su erección tome la prueba y lentamente la gire.

— Oh, bendito jesucristo, gracias.

Negativa. La prueba era negativa. Tome las otras tres, y también estaban en negativo.

— Es negativo...—susurro, en mi oído, asentí—. Yo digo que hay que celebrar.

Gire en mis talones y lo mire con una sonrisa, pasando mis brazos por su cuello.

— Hay que usar condón esta vez...—le dije, el hizo un puchero pero asintió.

— Está bien.

Reí cuando tomo mi cintura y me cargó sobre su hombro, cuando le grite que me bajará solo me nalgueo.

Demonios, amo a este pendejo.

Y estaba feliz, porque de ninguna manera tendré 18 años y dos jodidos bebés.

author's note ¡!

oh dios, creo que moriré.

okay, esto se acabó mis soles.

de echo, en unos segundos estaré
subiendo el epilogo, así que no se separen de la pantalla uwu.

Las amo, gracias por llegar hasta
aquí.