xx. be still

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Screw the Pogues' rule

Screw the Pogues' rule

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Anne

''Buenas noticias para los residentes de los Outer Banks: Dominion Power afirma que su línea de transmisión subacuática debería de estar funcionando en un plazo de veinticuatro horas..."

Las voces procedentes de la radio del coche provocaron que me despertara y abriera mis ojos, soltando un gran bostezo. Definitivamente, dormir en un coche no era lo más cómodo del mundo, y mucho menos cuando tienes los pies de JJ encima y la mano de John B en toda la cara. En cuanto me di cuenta, los aparté de encima mío con un poco de brusquedad, consiguiendo que ambos se despertaran. A lo lejos, podían escucharse varios coches de policía acercándose hacia donde nos encontrábamos, así que rápidamente echamos los asientos para atrás y nos ocultamos. Una vez que pasaron de largo, y continuábamos sin ser descubiertos, volvimos a dejar los asientos como estaban y respiramos aliviados.

''... No hay detenidos por el asesinato de la sheriff Susan Peterkin. La policía ha emitido un comunicado en referencia a un sospechoso...''

— Kiara, por dios, apaga eso —supliqué, no queriendo escuchar tanta mierda de buena mañana. Ella me obedeció sin poner ninguna objeción. Supongo que, en el fondo, ninguno estaba dispuesto a seguir escuchando más y más mentiras. Todo por culpa del bastardo de Ward Cameron.

— A ver, pensemos —la voz de JJ rompió el silencio sepulcral que se había instalado en el coche— Igual a los listos se os ocurre algo —dijo, mirándonos a Pope y a mí— Pero... ¿a quién va a creer la poli? ¿A Ward Cameron o a nosotros? La acusación es un pez gordo de la construcción, casi el rey de la isla, con línea directa con el gobernador; y el acusado es John B, que es básicamente un chaval de dieciséis años del Arrabal.

— Gracias —respondió JB irónicamente.

— Mierda —soltó Pope.

— Igual yo puedo ayudar —todos me miraron, sin comprender— Quiero decir, yo estaba allí con JB, mi testimonio tendrá algún valor, ¿no?

— Eres otra adolescente de dieciséis años, del Arrabal y amiga íntima del principal acusado —señaló Pope— Da gracias que Ward no haga que te arresten.

— Es muy peligroso Ann —corroboró JJ— Podrían acabar acusándote a ti también — bufé exasperada al quedarme sin más ideas— Pero a ver tíos, tengo una solución: Yucatán, ¿vale? —y ahí íbamos de nuevo— Te digo que es la única opción, ¿qué otra opción te queda? —dijo esto último dirigiendo la mirada hacia John B.

— Para ya con México, ¿vale? —le cortó John B— Sarah me echará un clave.

— Ella estaba de testigo —defendió Kie la idea del pecoso. Pope, JJ y yo nos miramos, no muy convencidos de su brillante plan.

— ¿Y se va a chivar de su hermano? —inquirió Pope, y tenía razón. Por mucho que Sarah nos hubiera ayudado con todo el tema del oro y que tuviera sentimientos por el pecoso, ¿estaría dispuesta a entregar a su familia a las autoridades? Lo dudaba mucho.

pogues [jj.m.]Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang