Melodrama

Track 5, Lado B. Green light.

"Y te escucho siempre en mi mente. Te veo en cualquier lugar al que voy. Estoy esperando a que enciendas la luz verde, eso es lo que quiero."

Green light, Lorde.

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TINE

Está celoso, se muere de celos. Tine había pensado que sentirte celoso de alguien era divertido pero no lo es, al menos no cuando el objeto de esos celos es Sarawat. Mucho menos cuando aquella chica que ríe con él y lo hace reír a su vez, está tan cerca suyo.

Aunque Tine y Mil siguen bailando uno muy cerca del otro como es su costumbre y tradición, los ojos de Tine no se separan de Sarawat. Algo en el corazón del chico Teepakorn está ardiendo. Odia a aquella chica quien es demasiado bella para ser verdad. Sarawat dijo que se llama Pam. Una de las enfermeras que cuidó de su madre en el hospital. La única persona que, al parecer, estuvo escuchando al muchacho en aquellos tiempos difíciles. Pam fue la única persona que al parecer puede hacer que Sarawat ría así.

Y es que todo pasó demasiado rápido. En un instante, Sarawat estaba ahí con él, y aunque se mantenía un poco silencioso en medio de la alegre charla que él sostenía con Pear y Mil, de pronto, ante ellos se materializó la figura estilizada de aquella chica que apareció casi de la nada gritando el nombre del fotógrafo quien corrió a abrazarla pareció llevarse la felicidad de él.

La chica se había presentado con una alegre sonrisa. Dijo que estaba de vacaciones y que jamás hubiera imaginado encontrarse con Sarawat ahí. Y Sarawat, claro, había ido con ella cuando la chica le pidió acompañarla a pedir un trago. Sarawat, el idiota Saraleo, había corrido detrás de la chica linda porque al parecer era un hombre imbécil como tantos otros que no podían resistirse al encanto de una cara bonita.

Además, sí, Tine podía aceptar que Pam era el estereotipo de belleza femenina en Tailandia pero... ¿por qué lo besó a él si al parecer, ha estado enamorado por siempre de la enfermera linda? Si Sarawat es capaz de sentir cosas por una chica... ¿él fue sólo un juego?

—Oye, me haces daño— dice Mil y Tine nota que está sujetando a su amigo con demasiada fuerza por la cintura.

—Perdón...— dice Tine pero sus ojos no se apartan de Sarawat y de Pam y el corazón del modelo parece detenerse cuando la joven se acerca al oído del fotógrafo para susurrarle cosas que el mundo entero no tiene derecho a escuchar.

—Sabes que podrías recordarle al señor fotógrafo que solo tiene derecho a mirarte a ti, ¿verdad?— dice Mil riendo de forma traviesa—. Me habías dicho que tu chico jugaba para nuestro equipo ¿qué demonios significa esto?

—No sé, Mil, no sé...— dice Tine y algo en sus ojos, algo que arde como lava volcánica le dice a Mil que no es buena idea seguir bromeando.

—Oye, si te importa a tal grado, podrías hacer algo— dice Mil y Tine lo observa con interés—. Es decir, aunque los dos no tengan una relación de verdad, él es tu amigo ¿no? Los amigos pueden conocer a los amigos de sus amigos así que... ¿por qué vas, te presentas, averiguas quién es la chica y dejas de desquitar tu furia conmigo?

— ¿Crees que... podría? No es nada malo, ¿verdad?

—No, nada malo. En realidad estás siendo amable y atento, ya sabes...

—Por supuesto, soy un caballero ¿cierto?

—Más que un caballero, eres un príncipe— dice Mil y él y Tine se echan a reír—. Y estás muy interesado en la vida de tu nuevo amigo, el que te besó y te dijo que sólo quiere estar contigo...