-Por si no lo has notado, Brittany, ahora mismo estamos muy ocupados para atenderte-Intervino Quinn, dedicándola una sonrisa forzada- Así que... ¡Largate de aqui!

-¿Y se puede saber que es eso tan importante que las mantiene tan ocupadas?-Se burlo de manera sarcástica-No estaran planeando quemar el instituto ¿Verdad?

-¿Por qué?-Cuestionó Mercedes, haciendo una mueca de disconformidad-¿A caso vas a ayudarnos?

La joven Pierce se encogió de hombres, al parecer no demasiado preocupada por la integridad de su centro escolar. En realidad, haciendo cálculos aproximados, tardarían unos tres meses en reformarlo nuevamente y ella estaba dispuesta en empalmar sus vacaciones de verano con las de navidad.

-Estamos acompañando a la chica nueva a la direccion-Explicó Marley

-¡Marley!-Protestó Mercedes, soltando un suspiro de resignación-¿Es que no sabes mantener la boca cerrada?

-¿En serio?

Brittany intentó divisar a la nueva estudiante, pero como los chicas estaban en medio pero no consiguió ver nada.

-¿Y quién es?-Se interesó.

-Una chica-Contestó Mercedes.

-Ya lo sé-Gruñó, molesta-Eso lo he deducido yo solita.

Sin querer, la carpeta que la rubia llevaba entre sus brazos, cayó al suelo haciendo que todos los papeles que tenía dentro quedasen esparcidos.

-Genial-Masculló, sarcástica -Sencillamente genial.

-Bien, ahora que nos has demostrado que estás loca, deja de meterte en nuestros asuntos y lárgate-Ordenó Quinn, comenzando a enfadarse.

Ignorando olímpicamente a a su prima, Brittany se agachó a recoger los papeles siendo imitada por la nueva estudiante, quien se había hecho paso entre las chicas para ayudarla. La rubia, que no había levantado la mirada, sonrió y le dedicó un tímido gracias mientras guardaba los papeles en la carpeta.

-Hola soy...-Brittany levanto la cabeza para mirar, asombrada, a la persona que la estaba ayudando- ¿Rachel?

-Brittany-Concluyó la nueva estudiante, reincorporándose lentamente

Las cuatro chicos se miraron desconcertados, más aun cuando ambas jóvenes se abrazaron con efusividad, olvidándose de ellas y de las hojas que aun permanecían en el suelo.

-Definitivamente son idiotas-Sentenció Brittany, emocionada-¿Cómo no os habéis dado cuenta antes que estabais hablando con Rachel, Rachel Bery?

-Rachel Bery-Murmuró Santana prestando por fin atención ala chica nueva y soltando un silbido tras recorrer con la mirada a la joven de arriba a bajo-Vaya, que cambio.

Mercedes y Marley asintieron sin saber muy bien que decir, mientras Quinn seguía observando a la chica con un deje de incredulidad y escepticismo.

-No-Sentenció finalmente, negando con la cabeza-No podemos estar hablando de la misma Rachel Bery. Imposible.

-¿Por qué?-Cuestionó Marley.

-Porque si no recuerdo mal, y es evidente que no es así, la Rachel Bery amiga de Brittany, era una chica normalita, de voz chillona, con el pelo un poco enmarañado y una mal humor que no podía con el-Explicó, en un tono evidente

-Veo que no exagerabas cuando decías que seguían siendo creídas-Suspiró Rachel, con una mano en las caderas-No han cambiado nada.

-¡Oh sí! Sí que lo han hecho-Le aseguró la rubia, sarcástica- Aun lo son más. Bueno, ¿No tenías que ir a la dirección?-Sonrió, maliciosa- Pues te acompaño. Además, aun tienes mucho que explicarme.

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