Capítulo 10

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Ginny se despertó, sentía un pequeño dolor de cabeza, por el llanto de la otra noche y un mareo, pero se recompuso, negó rápidamente para despejar sus ideas, debería ir al hospital de inmediato a ver a su padre, pero se le hizo raro encontrar la cama vacía.

Al leer la nota, tranquilamente pensó que su novio debería estar en el cuartel de Aurores ahora mismo terminando algunas tareas o los gemelos le debieron haber pedido algunos encargos, si pretendían pasar toda la mañana en el hospital.

Se vistió rápido y fue a la red flue para San Mungo, donde se encontró con su madre y su hermano Ron, también ahí estaba Fleur y Bill que miraban a su madre seriamente.

--- Por favor, vaya a descansar, yo me puedo quedar un rato --- decía su cuñada la francesa --- mis padres están cuidando a los niños, necesita dormir.

--- Vamos mamá, es importante que descanses --- le decía también Bill --- no queremos que tú también enfermes.

--- No le he fallado ningún día a su padre, y ahora que más me necesita no será la ocasión --- dijo tercamente su madre, Ginny rodeo los ojos.

--- Mamá, ve a descansar, es más, vamos los dos, dormimos un rato y luego me comprometo a traerte de vuelta --- dijo Ron firmemente --- Hermione saliendo del ministerio dijo que se daría una vuelta para traernos algo de comer.

--- Hazle caso a Ron mamá, es importante que descanses --- le dijo Ginny acercándose y abrazándola --- yo entro en turno dentro de unos veinte minutos, también estaré al pendiente de papá, por favor, entre Fleur y yo podemos.

--- Además también dijo Fred que se va a dar una vuelta, George se encargara de la tienda --- le dijo Bill.

--- ¿George se encargara de la tienda? --- pregunto dudosa Ginny, su hermano asintió --- pensé que Harry lo iba hacer... bueno debe estar entonces en el cuartel.

--- No creo Ginny, Harry libraba hoy --- le recordó Ron --- Kingsley le dio unos días.

--- Ah, es que dijo que iba hacer unos recados --- dijo pensativa, Harry nunca era tan evasivo --- pensé que era del trabajo... se me hace raro.

--- No seas paranoica, y dale un respiro al pobre --- le dijo Ron rodeando los ojos, Ginny lo fulmino con la mirada --- hermanita, pareces de esas novias que solo quieren saber dónde están ellos, también tiene sus cosas, no solo eres tú.

--- ¡No es eso Ron!, solo que... --- hizo una mueca --- bueno, tengo un mal presentimiento.

--- No creo que tengas de que preocuparte, Harry es muy lindo y atento contigo, estoy segura que no es nada --- le dijo Fleur a su cuñada, luego se volteó a su suegra --- por favor Molly, ve a descansar.

--- Está bien, pero solo un rato --- dijo abrazando a sus hijos.

Molly Weasley estaba a punto de irse, cuando vio como Harry llegaba, le iba a sonreír encantada, el muchacho todavía no era el esposo de Ginny, pero se preocupaba por toda la familia y siempre estaba ahí, le agrado desde un principio y supo que sus instintos no habían fallado...

Ginny también le sonrió al verlo llegar, pero su sonrisa se desvaneció, al verlo vestido con una túnica demasiado cara y atrás de él tres sujetos en traje negro, parecía como si le estuviera cuidando las espaldas.

Harry llego a San Mungo para poder despedirse de su felicidad y dar el dinero, pero con una mueca levanto la mano, pues los dos mastodontes que le puso su abuelo para evitar que escapara parecían estar pegados a su sombra.

--- Vamos a esperar aquí --- les dijo Theo a los otros dos, ambos iban a replicar --- el señor Potter hizo un juramento, no va a escapar, así que denle privacidad, ¿quedo claro?

Todo o NadaWhere stories live. Discover now