Capítulo 2.un repaso por la gente y los lugares P 2/2

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Entonces, no pensé más y la invité a bailar:

—Bea— dije impetuosamente— el mundo se acaba mañana... se acaba si no nos acabamos el vaso, las viandas...— dije aún con más ímpetu— pero se acaba incluso más si no vamos a bailar— ya craquelando toda falta de personalidad— ¿me...? ¿concedes el permiso de verte las caderas mover?

Ríe. Risa insistente, vocal en su máxime expresión.

—Es muy graciosillo... eso... tú querido, eres muy gracioso— dijo— ehm... ¿Por qué no?

La tomé de la mano, fuimos aceleradamente a la pista y me sentí como "rey". ¿Qué más podría decir de esto? Los pasos con originalidad siempre funcionan y la música... increíble, bien ambientada. Veía a lo lejos, interesante panorama: Jimmy ya casi no le resultaba congeniar con la de su lado, era una mujer complicada, era la "chica sin nombre", la que antes dije que no sabía su nombre, de la que menos conocía. Los otros no intentaron "hacer los puntos", sólo se dedicaron a hacer vida social con todas las que podrían estar ahí, sin embargo no intentaron cruzar con la conquista de Jimmy. Quizá más adelante esto progrese.

Me fui por el camino fácil: la abracé en cierto momento que Bea me dijo algo dulce, traté de ser directo después, que se entendieran mis razones por sexo hacia ella y muchas cosas más. Entonces cuando ya había avanzado bastante en el ligue con ella, ella se dio un tiempo para reposar y yo fui a la barra (jamás habría de posarme de nuevo en la mesa: con los perdedores: digamos que no lo haría, es lo peor). Entonces sentado ahí y al lado un hombre de bigote, polerón Adidas con cierto "cambio" con respecto a su posición etárea no parecía muy contento pero estaba así al lado mío, pasando ese tiempo. Así sentado yo a un lado empecé a ver que mi gente ya estaba "emparejada" con las mujeres que tanto interesaban ¡Hey! pero esa que no "quería" con Jimmy, la "hada mentira" como le puse de sobrenombre pues poseía cara de ángel pero una boca de no-sincera: un labio enorme y culpable, a veces se le humedecía por pavor, se notaba en el sobresalir del labio inferior esta "culpabilidad"... y por lo mismo no había persona que le supiera el nombre porque era ella era la que menos interés generaba. Jimmy, frustrado, fue a por otra mujer en otra mesa, tratando de charlar con más gente, en plan "patudo".

Vuelve mi chica y el sujeto de detrás se mueve y muéstrase enfadado y se va. Entre eso, le hago un gesto de complicidad que ella "responde", cuando ya me paro de la silla de la barra, con una caricia en la mejilla, esto me hace estar a punto de darle un beso pero esas cosas de la vida, de la vida orgánica "interior" me lo impidió, y tomé el baso de vodka atrás, y lo bebí y le dije al barman qué buena preparación, buen cuerpo, demasiado. Bea se sintió insegura por eso, pero más rato pareció feliz y dichosa. Volvimos a bailar y me sentí poseído por el ritmo, por sus caderas sexys. En los momentos de relajo, cuando Adrián a lo lejos se veía complaciendo a Alicia y Berni, pero ellas, ya colocan cara de aburridas con cada cosa, no necesitaban más. Es todo lo que sé. Entonces regresé al baile y a romperla hoy y de reojo noto que Arturo está emparejándose con la chica desconocida. Ella ponía caras hermosas a Arturo y eso parecía ser signo de agrado, entonces ya me lo imaginaba ella con él. Adrián por su parte estaba muy lejos de terminar con chica hoy, habla mucho, es muy intelectual y eso le juega en contra. Las dos chicas estaban igualmente aburridas. Adrián, cuando me acerco a donde estábamos me dice "está allá atrás ese Jimmy, y ¡qué coño! Tienes los ojos gigantes". Guau, no lo hubiera pensado, así que con la voluntad deshinché los ojos. No tenía alternativa, no es bueno andar con cara de idiota por ahí, tomé de la mano a Bea y nos sentamos. Llamamos a Jimmy, no, él no quería escuchar así que le mandamos un mensaje de texto. Más rato lo leyó y volvería con nosotros sin tener éxito con la chica quien estaba "haciéndole los puntos" en la otra mesa.

El Asesor --Historia de desmadre y fiestas hasta no tolerar--Donde viven las historias. Descúbrelo ahora