c a r r e t e r a c a r a c a s - l a g u a i r a ⊙ h a n j i s u n g

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ㅡRaro porque siempre parece que síㅡ más que una respuesta, las palabras de Jeongin parecían más las consecuencias de un pensamiento apresurado, aun así en lugar de contestar, Angelo solo presionó sus labios y sin más inclinó un poco la cabeza a la izquierda mientras asentía.

Extrañado, Antonio nos miró un segundo antes de retener una risa como si de un reflejo se tratara.

ㅡ¿Pero ustedes sí sabían que ellos venían, verda'?.

Al no escuchar una respuesta por nuestra parte dejó salir unas cuantas risas que fueron seguidas por Jeongin, a pesar que él también estaba en las mismas, al contrario de ellos, Mark reflejaba la verdadera duda en su rostro y después de unos segundos pareció entenderlo.

ㅡPana, Bang sí me dijo que no les dijiera nada, pero a estas alturas yo pensaba que aunque sea se habían revisado el teléfono y se enteraron o él mismo les aviso.

ㅡNojoda, menos mal que así fue. Ese mardito...ㅡ vergación, pero es que Felix hoy se levantó violento.

ㅡYa los voy a llamar pa' ve si es verda' o le vieron la cara de poceta a Marco Polo.

Después de una llamada de casi unos 2 minutos por parte de Seo, como si nada entre el marco la puerta deslizable del patio, la figura de Minho se hizo visible, con el mismo gesto de siempre y los ojos más cerrados de lo común. Al notar nuestras miradas sobre él, curvó sus labios levemente en una sonrisa para luego levantar su mano derecha, cerrar su puño y levantar su pulgar.

Como siempre, usaba jeans de su color predilecto; negro, skinnys y rotos en las rodillas, se abrigó con un suéter cerrado blanco sin capucha con un estampado del mismo color de sus jeans con un "If I have a face of few friends it's because, I actually prefer the cats" sobre su pecho encerrando la carita de un gato en un círculo, caminaba torpemente en el pasto cuidando de pisar en el lugar correcto con las intenciones de no ensuciar sus converse rojas.

Al llegar a su destino paró en seco y fingió estar sorprendido al vernos. Logrando que Seo y Hyunjin lo miraran de arriba a abajo con un gesto que denotaba desagrado a leguas, algo que no duró mucho porque después de eso se levantaron de sus sillas y lo saludaron como si le estuvieran dando el año nuevo y por supuesto los demás no se quedaron atrás.

Cuando vi el área medio desocupada, entendí que el único que faltaba era yo, así que por lo mismo me intenté levantar aunque quedé fue con las intenciones porque cuando Minho vi que me iba a levantar se acercó con si fuera un malandro y me dio la mano en el mismo saludo de siempre.

¿Ya ven porque es que uno tiene que ser coño e' madre en esta vida?.

Como era de esperarse, despues de unos días minutos hablando sobre cómo había sido la vida de Minho en la universidad, hablándonos de las cagadas que se mandó, la profesora que le trae la vida triste, las empanadas de cazón que venden en la cantina y él asegura que hasta daría culo por la receta, vivencias nuevas en el metro, todos a excepción de Juanpa y Minho sugirieron buscar una nueva botella y algo de hielo pero aun así solo Juanpa y Angelo se ofrecieron a hacerlo, por lo que desde hace unos minutos se habían perdido entre el bullicio de gente dentro de la casa.

Hyunjin hablaba sobre sus opciones a escoger en la universidad y por un momento, me alejé de sus palabras y terminé mirando a Minho por unos fragmentos de segundo, en los que me pareció notar que él hacía lo mismo que yo. Como si lo último no hubiera sido algo de importancia seguí escuchando al resto hablar, acotando algunos datos un poco absurdos de vez en cuando y con un poco de atención en las melodías que se colaban a través de la puerta que da al patio.

Seguí enfrascado en las palabras que salían de la boca de Felix, que terminó contando cómo entró a un teibol dance por error cuando tenía alrededor de unos siete años, recién empezaba a relatar el asombro que sintió cuando descubrió en qué lugar se había metido, un pequeño estruendo a mi lado se robo mi atención y por el más puro susto di un salto todavía sentado, al girarme no encontré más que una nueva silla en diagonal a la mía con Lee Minho sobre ella.