26.Chicos

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Iba a camino a la universidad, ya había dejado a Maddie en su kinder y... y sentía que algo faltaba, lo estuve sintiendo todos los días desde que vi a Tyler en el aeropuerto.

-¿Maggie?-Escuché una voz muy familiar preguntar mi nombre muy asombrado.-

-¿Nate?-Dije en el mismo tono.-

-¿Que haces?-Me preguntó.-

-Voy camino a la universidad, ¿y tú?-

-También.-

-Oye, me toca ciencias, ¿y a ti?-

-Lo mismo-Contesté con una sonrisa.-

-Valla, hoy sí que estás sonriente.-Comentó riendo.-

-Lo sé, es que hace unos días me quité un gran peso de encima y pues la vida se ve de una muy distinta perspectiva.-Reí.-

-Así es.-Me sonrió.-

-Eh?-

-Que comprendo, a veces pasa y a mi ya me sucedió ese momento tan extraño.-Dijo algo nervioso rascando su nuca.-

-Eso creo...-

Oigan, este momento es más vergonzoso que ver a mi padre bailando la macarena con un huevo en su cabeza.

-¿Te parece si vamos juntos a ciencias?-Me preguntó.-

-Me encantaría, nos vemos en 10 minutos..-Le sonreí.-

-¿Por qué?-

-Iré por algo de desayunar.-Reí.-

Me desvié del camino y me dirigí a la cafetería. Por suerte la cafetería estaba a 3 pasos de mi clase y a 5 de mi distancia actual así que ya se podría decir que estaba allí.

En fin, me acerqué y cogí un muffin de vainilla con chispas de chocolate, luego pedí un café para llevar y me lo sirvieron todo en una bolsa de papel cartón.

Me di la media vuelta y un chico muy apuesto chocó toda su bandeja de comida y bebidas en mi ropa y parte de rostro. Me quejé con un sonido típico mío y comencé a maldecirlo. Él se río en voz baja por mis acciones y luego se calló para disculparse. 

-Eres un idiota-Le grité.-

-En serio lo siento.-

-Claro que no. Tu nunca sientes nada.-Y luego me fui oliendo espantoso.-

Las ahorcadas no tardaron en llegar, oh dios mío, esto no estaba pasando. Ese chico embarró mantequilla de maní (maní untable) cerca de mi nariz  y realmente, además de ser alergica al olerlo me provoca nauseas extremas. 

Corrí rápido al baño para cambiarme de ropa y si es posible vomitar. 

(...)

Ya cambiada me dirigí a la clase ya que había comenzado y le explicaré a Nate lo ocurrido. Igual no entiendo la razón del porque tener que explicarle algo.

Me senté en mi asiento de siempre de ciencias y comencé a dibujar ropa en mi cuaderno de apuntes. De repente, me concentro mucho en mis pensamientos, sentimientos, opciones, todo y me di cuenta de que no quería ser lo que los demás esperaban de mi. No quería ser biologa, quería estudiar moda, ser diseñadora, etc.

Todo eso acabó con el rudo movimiento de una persona y tengo que admitir que además de rudo y molesto el movimiento fue fuerte y seco. 

-¿Te gusta la ropa?-

-Demasiado si es mucho decir.- 

-¿Y que haces aquí?- 

-La verdad... es que n-no lo sé.-

Me paré en seco y lo observé bien y me di cuenta que era el chico de la cafetería. Oh no. 

-Eres tú! Maldito.-

-Oye, no hice nada malo. Lo siento. Soy Sean Williams.-Se presenta el rubio.- 

-Bien.-

-¿No me dirás el tuyo?.-

-No.-Dije seca.- Tal vez no ahora, pues me cambiaré de clase y me dedicaré a la moda y si quieres obtener mi nombre, pues es algo que será dificil ya que no nos veremos más o no tan seguido, tendrás que ganartelo.-

-Oh..-

Warning [EDITANDO]Where stories live. Discover now