Saku Harem (OneShot)

El rector alias "dios pecaminoso y sabroso" (MadaSaku)

—Sakura—

La he cagado profundamente, soy la presidenta de la hermandad "Kunoichis", sabia que algo saldría mal ese día, me levanté con una sensación de desasosiego y nudo en el estómago.

La fiesta de aniversario de nuestra hermandad fue planeada con meses de antelación, se suponía que debía representar lo perfectas y populares que éramos, pero de la nada nuestra casa se llenó de gente que no habíamos invitado y todo se desenfreno.

El alcohol no ayudó en nada a parar el inminente desastre que se avecinaba, las chicas comenzaron a desenfrenarse, los chicos de la hermandad Shinobi hicieron de las suyas y para cuando me di cuenta habían hombres peleando, vidrios rotos, un desastre fuera de nuestras casa y más de 500 personas gritando y bailando eufóricas por todos los rincones de la casa, un idiota choco contra la valla blanca que tanto nos esmeramos en decorar y la policía llegó.

Todos los traidores corrieron, nuestra hermandad parecía una casa ocupa y con Ino y Tema fuimos detenidas por disturbios.

Es mi último año de medicina, soy una alumna ejemplar, siempre fui la señorita perfección y me preocupé de que mi imagen fuera un ejemplo para las demás.

Ahora estoy frente al rector, es caliente el condenado hombre, Madara Uchiha con sus 35 años es la cosa más sensual, frío y correcto que puede existir.

Se que no me perdonara el escándalo del que soy responsable, no está en su ADN tener buen corazón, ese hombre es intransigente.

¿De donde lo conozco fuera de la universidad? Ah! Eso es interesante, es el sexy tío de mi estupido y mujeriego ex, lo vi en fiestas de la familia Uchiha y mis hormonas saltaron a penas esos penetrantes ojos se posaron en mi, tengo 22 y para él soy más bien como la mocosa escandalosa que desprestigio a la universidad.

—señorita Haruno, lo que ha hecho es imperdonable, no solo puso en riesgo la integridad de la universidad si no que su hermandad la más prestigiosa de todas ha caído en desgracia.

—no fue mi culpa, ya le dije que yo invite a esa gente.

—pero usted está a cargo y la responsabilidad se posa en sus hombros.

Dios! Es tan caliente cuando está enfadado..

Ese traje negro se le pega a los músculos como si fuera un guante, que tenga el cabello largo y rostro de adonis no ayuda en nada.

Ni por que llevo un maldito vestido ceñido y con escote deja de ser un gran hijo de puta.

Me levanto y pongo mis manos en el escritorio, estoy dispuesta a todo con tal de no perder mis años de estudio.

—señor Uchiha se lo imploro, sabe que soy la mejor de mi carrera, sabe que jamás he causado un problema, por favor! Haré lo que sea! Pero no me expulse.

Sus ojos negros viajan a mi escote y luego suben a mi cara, tiene un brillo sensual que acaba de aparecer, lo tengo justo donde quería y eso me encanta.

—señorita Haruno, creo que no comprende lo complicado del asunto, no puedo hacer vista gorda a este problema.

Sus palabras frías dicen una cosa, pero sus ojos dicen otra..

Recorro el escritorio rozando la madera con mis dedos, nunca dejo de mirarlo a la cara, él alza su ceja pero no dice nada.

Me acerco a su rostro, mis manos están en el respaldo de la silla, mi nariz casi rozando la suya, me estoy pasando y humillándome si me desprecia, pero este hombre es material para mi cuerpo y eso ya lo decidí.