︙❛ Un panda a domicilio ❜ ┇ ❝ Taoris ❞

❀┇❝ C i n c o ❞

Cuando YiFan había abierto la caja donde Huang ZiTao venía en su forma de panda, cuando le contó que era parte de la Wuista cultura de los Zhang, cuando lo llevaba de compras, cuando le mostraba las estrellas, cuando le sonreía cada que el panda despertaba de una pesadilla, cuando curaba sus heridas que el mismo se hacía al practicar sus artes marciales, cuando lo consolaba por no poder hacer bien algo, cuando limpiaba sus lágrimas, cuando ambos de iban a nadar a la laguna, cuando iban a mirar la naturaleza que YiFan disfrutaba pero que ZiTao odiaba, cuando cantaban acompañados de la flauta de ZhuZhu, cuando corrían para no ser capturados por la loca señora europea, cuando se escondían de ZhuZhu para evitar comer verduras, cuando se quedaban en silencio durante horas mientras dormían, cuando ZiTao le abrazaba para evitar soñar feo, cuando YiFan abrazaba a ZiTao para consolarse a si mismo sobre sus pensamientos sobre su madre, cuando sentía la increíble paz al hacerlo, cuando tenía el impulso sucio de lanzarce sobre el y cuando le enseñaba todo lo que sabía, nunca pensó que algún día se encontraría en aquella difícil situación de saber que le había besado. Que el había enseñado en el panda aquello.

—¿Me besaste...?—pregunto aún sin poder creerse lo que escuchaba, porque perdido estaba en su cabeza al saber sobre ello, pues no solo había dado su primer beso con ZiTao, si no que ni siquiera había sentido aquello. Se sintió decepcionado.

—Si, si lo hice...—contesto de manera nerviosa el azabache. YiFan aún le miraba con los ojos abiertos y sus cejas levemente levantadas. ZiTao se moría de vergüenza, pues aquello de decirle al alto sobre aquella cobardía de sus doce años a nivel de panda, no estaba en sus planes; le había salido natural, como si necesitara decirlo. —Y yo lamento.—aclaró.

—Yo... ¿Qué se sintió?—aquella pregunta hizo que ZiTao ya no pudiera mantener la vista en los ojos oscuros de YiFan, por lo que sonrojado y nervioso, miro hacia sus manos. "¿Qué debo decir?" ZiTao mentiría si dijera que nada, que solo había sido un roce extraño, pero "¿YiFan sabrá que miento si digo eso?" Entre la duda, decidió solo escapar.

—Si no nos vamos ahora, se hará muy oscuro...—dijo una vez pudo aclarar su cabeza. La cinta en su cabello ya le dolía, así que se levanto de la cama y fue por su caja para dejar ahí lo que llevaría y lo que quería. YiFan por su parte, seguía más que interesado en lo que aquel azabache había sentido, pero tenía razón, sería muy tarde.

—Apresúrate. Yo iré por mis cosas.—dijo y salió de la habitación. Fue cuando escucho y enfrento a ZhuZhu.

—Necesito hablar con usted.—le dijo la joven de ojos rojos. YiFan asintió. Ambos fueron al jardín principal de la casa, donde sentados frente a frente en el césped, YiFan noto con más detalle a la mujer, esta era de piel blanca, cabellos risados color café oscuro y una pequeña cara, con ojos grandes y claros y una fina boca. Era hermosa, pero no dejaba de sentirse mal en su presencia.

—¿Pasa algo?—preguntó ya harto de solo intercambie miradas. La mujer se acomodó y asintió.

—Le quiero pedir que no se lleve a ZiTao.

—¿Por qué?—cuestionó ocultando una leve risa pero siguiendo en su posición recta y elegante de siempre, sabía que, se dijera lo que se dijera, la posición del cuerpo siempre debía ser elegante y recto, pues así se lograba intimidar por alguna razón. "La tranquilidad en una discusión siempre da miedo..."

—Me gusta ZiTao. Y quiero que él se sienta del mismo modo conmigo.—YiFan sintió como su estómago se apretó. No pensó que necesitara una conversación tan extraña para entender que sentía celos, pero se sentía extraño, "¿Celoso de él... o de ella?" No se entendía a él mismo, a sí que para no perder más tiempo, imponerse a él mismo e irse, sería lo mejor.