Capítulo 5 Un mundo que no quiero explorar

10 1 0
                                    


Ir a trabajar en algo que no entiendo y no me gusta para nada, volver al hábitat después que rutina más horrible, aún no consigo acostumbrarme a ver esa monstruosa máquina me sigue dando extraños escalofríos ver como se mueve y como se queda inmóvil frente a mi hábitat cada mañana, lo peor es que no existe algo que pueda hacer para evitar ir a trabajar o volver a éste hábitat que se supone es nuestro "hogar". Ya son las 23:41, y hay un completo silencio, ni siquiera se escuchan los pasos de esa máquina que llaman "Comando", ¿están todos dormidos o están igual que yo lleno de dudas y odiando esta rutina? Es algo que quisiera saber pero no me atrevo ni de saludar a las otras personas que viven por aquí siento que no son personas de fiar, así que me mantengo al margen y cuando tengo oportunidad de escuchar algún dato de importancia me dedico a escuchar todo para recepcionar aquella información.

Me acerco a la puerta para poder abrirla y poder ver un poco a la luna, hace mucho tiempo que no la veo, pero está bloqueada no hay forma de poder abrirla estoy completamente encerrado en mi propio hábitat, no puedo creer que el gobierno o quien dirija todo esto nos quiera así de controlados ¿con qué fin querrían eso? Caigo desilusionado al sofá de color blanco igual que el interior del hábitat y enciendo el monitor, debo decir que apenas sé como usar este extraño aparato que muestra imágenes, veo a una mujer y a un hombre bien vestidos, hablan sobre alguien importante no escuché el nombre de dicha persona y bueno realmente no creo que debería interesarme.de todos modos solo encendí esta cosa para no escuchar mis pensamientos. Miro el telereloj que estaba parpadeando indicando que son las 00:30, y el monitor se apaga de golpe no sabía que esas cosas estaban sincronizadas o algo, entonces decido de una vez ir a la cama para dormir y aguantar un día más en ésta ciudad, viendo personas que no conozco y soportando una carga laboral que no puede llegar a gustarme, subo las escaleras y procedo a acostarme, me cubro con todas éstas sábanas y cierro mis ojos, para alejarme del mundo un momento gracias a mis sueños.

"Ciudad Unidad el lugar ideal para comenzar una vida llena de lujos y buenos recuerdos", me aburre tener que ver esa frase por todos lados, ahora que he salido del trabajo y aguantando una vez más al imbécil de mi jefe me siento en una banca mirando los distintos tipos de autos pasar y los transportes que llevan a personas lejos de aquí, me gustaría en algún momento tomar uno pero el precio para subir a uno es muy alto y con los créditos que consigo por éste trabajo no permiten darme ese lujo, por eso me pregunto acerca del lema de la ciudad "¿qué clase de lujos puedo tener si la cantidad de créditos apenas me sirven para conseguir alimentos?" Según mi madre que no sé en dónde está, quisiera saber de ella, verla una vez más, ver su rostro y poder formar un recuerdo fijo de ella, solamente tengo su esencia en mi, no puedo generar otro tipo de recuerdo de mi madre y eso me frustra demasiado. Perdón una vez más estoy divagando, ¿en qué estaba? A si, mi madre, ella me decía que antes habían libertades y las personas podían hacer muchas cosas y había mucha pero mucha diversión, pero ahora me dijo de eso no queda nada, me cuesta creer que hayan sido así las cosas pienso que ella le gusta soñar despierta igual que a mi, quizás de allí saqué esa capacidad no lo sé, joder, como qusiera poder verla una vez más.

Al transcurrir una hora me levanto de dicha banca, sería un buen momento para poder ir a comprar alimentos y tener que decir con mucha incomodidad y desinterés que agradezco todo al querido Jefe Supremo, odio tener que agradecer sobre mis cosas a alguien que jamás en mi vida he visto. Este si que es un mundo que no quiero explorar.

Post FuturoWhere stories live. Discover now