350

9 2 1
                                    





Yo sabía; yo sabia que se iba a ir y aún así me quedé.

Que estúpida fue esa desición.

Creí que me estaba haciendo fuerte pero parece que cada vez me rompen más fácil el corazón.
Tus palabras, eran un veneno.
A veces duele más quien dispara, que la propia bala.

Yo quiero entender, quiero hacerle entender a mi corazón; ¿cómo le dices adiós a una persona que lo es todo para ti?

¿Cómo?

Tal vez leas lo que escribo, tal vez pienses que extraño a alguien más, tal vez imagines que en mi mente ya no estas...
Pero cariño, no hay día que no piense en ti, porque mi corazón palpita tú nombre, anhela tu presencia y odia la distancia que se interpone entre tú y yo.











Restos de Ti Where stories live. Discover now