ZER∅

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La superficie terrosa tembló, grietas abriéndose sobre ella mientras la pelea se volvía reñida. El piso vibraba en cada paso del escuadrón de los gigantes robots en la primera línea de defensa..

Era temprano en la mañana, por lo que el grupo de pilotos dentro de sus cabinas compartidas eran capaces de observar, las bolas negras y sus dientes afilados corriendo en círculos alrededor de sus FranXX. Ellos debían acabar con todo el grupo de Klaxosaurios rogando por terminar en una sola pieza al final de eso.

Después de todo, ese era el único motivo de su existencia. Defenderían con sus vidas a la humanidad o la perderían en la batalla. O dejarían de ser los parásitos, los ángeles salvadores del futuro postapocalíptico. 

Código 093, concéntrate.

La voz de su asesor sonó por el intercomunicador dentro de la cabina del FranXX.

Código 093, apodado YoonGi, por su líder del escuadrón 16; apretó el mango que lo conectaba a su compañera, respirando con fuerza. Suran le miró sobre su hombro angustiada, rápidamente regresó la vista al frente

—Concéntrate, YoonGi. —Le dijo está vez SuRan, empeñada en no abortar la misión. Ella respiró. No existía forma de que continuara combatiendo, sin YoonGi y el vínculo mental que compartían no sería capaz de tomar el control de su robot.

El sistema de pilotaje del FranXX era una naturaleza incomprensible; un pistilo y un estambre, un hombre y una mujer, eran poseedores de una unión mental que haría funcionar a FranXX. Ninguna otra forma más.

YoonGi gruñó sintiendo gotas de sudor resbalarse por su frente, la presión del aire comenzaba a oprimirse y el calor parecía consumirlo.

N-no puedo... Me desvanezco... Murmuró al aire, perdiendo la fuerza de sus falanges.

¡Resiste, YoonGi! —Escuchó la voz de JiMin por la línea de comunicación y falleció entre la obscuridad lentamente ante la seguridad de la caricia ajena. La chica de cabellos azules lloriqueo asustada en el momento en que las luces de la cabina se apagaron y su FranXX con forma humanoide negro cayó al suelo terroso quedando en la disposición de esos monstruos mecánicos— ¡YoonGi!

Gritó JiMin, sintiéndose frustrado. SeulGi gimió adolorida por la fuerza que tiraba de su conexión con JiMin para expulsarlo.

—¡JiMin! —Le aclamó su compañera. El chico rubio maldijo entre dientes, intentando centrarse en mantenerse dentro de SeulGi y volvió a sujetar el mango, acabaría con ese Klaxosaurio y tomaría el robot de YoonGi con Suran para mantenerlo en un lugar seguro.

¡YoonGi se desmayó! —Todos en el equipo jadearon asustados ante el alarido ardido de Suran. Ella estaba seguramente esforzándose por mantener su equipo de pie, para no ser asesinada junto con su compañero dormido. Gritaba tan dolorosamente que todos los que podían escucharla tuvieron un escalofrío.

No lo hagas tú sola. —Le ordenó NamJoon, por el comunicador.

Todos los demás del escuadrón se movieron dentro de su FranXX para evitar que la unidad inmóvil tuviera un ataque, en una sincronización imperfecta. Fue bastante en vano, eran demasiado de esas cosas chirriantes que no podían cubrir todo el terreno.

Son demasiados... —TaeHyung suspiró, pasando la mano por su frente mojada.

¡Oye, no sueltes las palancas, idiota!

Le reprochó YongSung.

¡Deja de llamarme idiota, idiota!

TaeHyung volvió a suspirar por tener una compañera tan molesta, y miró hacia donde estaba YoonGi, también ansioso.

JiMin tiró de los dos mangos en ambas manos para mover el FranXX de YoonGi y salvarlo, podía ser aplastado o devorado en cualquier momento. Pero de pronto se tensaron con tanta fuerza que le fue imposible manipularlos. En su cabeza un ardor se acento y supo de inmediato que todo eso era culpa de su compañera.

—¡A-ah! ¡SeulGi! ¡Basta, los controles! ¡Déjame ir con YoonGi!

—¡No! —SeulGi se tensó con todo su empeño, JiMin tiró con más fuerza— ¡Termina tu tarea, inútil!

—¡Morirá! —Le rogó, sin aflojar la fuerza sobre los controles. La bola negra con líneas azules y sonidos infernales, se movió directamente hacia el Franxx inmóvil de YoonGi— ¡SeulGi!

—¡De acuerdo! ¡Es la última vez que te salvo el patético trasero, SuRan!

SuRan dejó de agitarse en el instante en que pudo ver a través dela pantalla, el robot de JiMin, avanzando hacia él. Los colores blancos de la cubierta chocaron contra el sol y sintió verdaderamente enamorada del color que le salvaría la vida.

JiMin sólo pudo pensar: Espérame, mi YoonGi.

Kiss of Death [JimSu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora