6. Una vampiresa con esclavo incluido.

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"Tres meses desde que soy esclavo de ella. . ."

- Han sido los mejores meses~ .- dijo la chica mientras maquillaba su pálido rostro, y sus ojos ámbar se veían espléndidos por la mañana.

- . . .

- Tienes unos bellos ojos para ser humano.

-O-Oh, gracias.- Sonrió un poco.- Mi mamá los tenía así también.

-Tuvo que ser una mujer nuy hermosa~- Lo miró a través del espejo.- Cuentame más de ti~

- Yo... desde muy pequeño he estado en la granja de su familia. Originalmente toda mi familia vivia en esos lugares... no conocia el exterior hasta que me encontre con usted...- suavementr comenzó a deslizar el cepillo dorado por el cabello.

-Mhn, entonces te llevaré a muchos lugares como recompensa de ser tan buen sirviente~- Sonrió mostrando sus colmillos.- Claro, si sigues siendo tan eficiente como siempre~

- ¡Lo sere...! P-Pero por favor no me mate...- dijo este mientras agarraba sus propias cadenas.- Es muy engreido decir esto pero, el collar es muy pesado y me lastima desde hace 1 semana...

-Como has sido tan bueno, te la quitaré.- Se levantó y quito aquella cadena suavemente y acarició su cuello.

- Gracias condesa Lisa Margarite de Sturian. ¡Ah!

De forma repentina su cadena comenzó a tintinear.

- Con la única condición de tener tu sangre... espero que no seas asi de malvado como para negarmela. Porque puedo matarte en un instante.

-N-No le negaría mi sangre. . .Le pertenezco de todas formas.- Susurró bajando la cabeza.

-Muy bien, me gusta que seas un buen sirviente.- Con sus largas uñas, acarició su barbilla.- Recuerda que soy la única que puede hacerlo.

- S-Si condesa...- "¿Por qué la condesa no me ha matado? Este ya es un tiempo de vida muy largo como para ser un esclavo de sangre.... No se lo que pasa por su mente... pero me gustaria que me lo dijera. Que fuese mas clara con lo que piensa"

-Bien ya estoy lista.- Sonrió abiertamente.- Vete a cambiar. Irás conmigo a conocer a mi futuro marido~

-¿D-De verdad?-

-Claro, tienes que servirme siempre~

- Si...

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- Bienvenido, Conde Therek. Pase a mi humilde mansión.

- Perdone, llegar antes que mi prometida seguro que es muy precipitado.

- No se preocupe. Mi hermana siempre llega un poco antes de la hora. Mis sirvientes estan preparando el té.

- Hay cosas por las cuales discutir con su hermano mayor.- dijo el pelirrojo de rizos.

-Mmmm, ¿como que cosas?- Se sentó en el sillón con las piernas cruzadas.

-¿Como va el negocio de las granjas? He oído que en estos ultimos años ha habido mucha sangre de calidad.

- Está muy normal. Ya sabes que las personas no deben vivir mas de 30 años, es por eso que en la familia Sturian convertimos a eso humanos para que sean vampiros de baja estirpe.

-Sus granjas siempre se han distinguido por la calidad de la sangre.- Bebio de su taza de té.

-Mi señor, aquí tiene su bebida.- Brett llegó con una copa de vino para el conde.

- Oh. Veo una cara jóven aqui.- dijo recibiendo cortesmente la bebida.

- Brett Allen... para servirle conde.

- Que educado. ¿Este jóven es su sobrino?

- Para nada, es uno de mis amantes.- dijo el castaño.

-¡. . .!- Se sorprendió al escuchar aquel título del conde.

-Vaya, es bien sabido de su amor al placer.- Río mirando al chico.- ¿Pronto llegará mi prometida? Hace mucho no la veo.

-Tiene que estar por llegar~

- Brett, creo que han llegado. Por favor, lleva esta paraguas para mi hermana en su trayecto aqui.

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Mientras tanto, dentro del carruaje de aquella mujer estaban dentro la condesa Lisa de Margarite Mighton Sturian y su banco de sangre Anthony, de la granja de humanos de los Sturian.

- ¡Haa! Que hermosa es la lluvia~

- C-Condesa... no tenemos paraguas. Si me permites conseguir-

-Buenas noches condesa.- Brett llegó con un paraguas para ambos.-  El conde Archer me dijo que le trajera este paraguas.

-¿Ves, Anthony? Mi hermano siempre piensa en todo~- Sonrió mientras se bajaba del carruaje con ayuda del rubio.

- ¿C-Como podria saber que la condesa no venia sola?.- dijo el chico pelinegro mientras atendia a la oferta del paraguas ayudando a la vampiresa primero.

-Es bien sabido que la condesa siempre anda con su asistente.- Dijo el rubio suavemente.-  Obviamente, el amo iba a saber que vendrían juntos.

-¿No creees que es una dulzura, Brett?- Pregunto la chica al rubio.

Maleficios Vampiricos - Colección de Vampiros llDonde viven las historias. Descúbrelo ahora