EMBARAZADA A LOS 15 AÑOS

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Ella estaba en la espera de las palabras del Hiccup casi desmayado. Sabía que la información lo había tomado por sorpresa pero no se sentía agusto si no hablaba o afirmara que estaria dispuesto, o no. Los nervios le causaban ganas de llorar. Sabía que no se trataba de un premio o algo por el estilo, pero aunque no lo pareciera, quería que su hija fuera feliz, sin la necesidad de tener que preguntar quién era su padre y que había pasado con el.

Aparte de que no lo podía hacer ella sola teniendo a unos padres demasiados ocupados.

El porfin se digna a hablar, después de pasarse minutos en analizar la situación en la que se encontraba. -hay dioses, espero no arrepentirme- suspira liberando de todo.

Ella sonríe ante la afirmación y siente que nada podía estropear las cosas apesar de lo tanto que ya estaba. Pero solo faltaba decir a alguien causando el temor de Hiccup...