¿¡Eres Un Omega!? - Kiribaku -

Capitulo 7

LEMON

-Pensé que eras un Alfa.

-Entonces pensaste mal pelo mierda, pues soy un Omega.

-Porque no lo dijiste antes.- "Ahora todo tiene sentido, al principio pensé que se enojaba por ser bipolar, pero ahora que lo pienso bien, cambiaba su actitud cuando lo asociaba con Alfa."- ¿Por qué lo escondiste? ¿Tenias miedo de que te hiciéramos algo?

-¡Porque mierda tendría miedo!

-Pues la mayoría en la empresa son Alfas o Betas, así que pensé que tendrías miedo que algún Alfa te hiciera algo.

-En primer lugar me ponen un dedo en cima y los mato, y en segundo lugar yo nunca escondí que fuera Omega, ustedes asociaron y dieron por hecho que era Alfa sin preguntarme.-

-Pero...- Antes de que Kirishima pudiera preguntar otra cosa el cenizo volvió a colapsar, dándose un fuerte golpe en la cabeza.

-"Mierda, ahora que hago, no sé en dónde vive, si lo llevo a mi..."- El claxon de un coche lo pensamientos, el Aber que había pedido antes al fin había llegado. Subió el cenizo al coche con dificultad, pues las feromonas de este eran muy fuertes.

-¿Cuál es su destino?

-Al motel mas cercano.- No lo pensó mucho, pues no tenia algún lugar para llevar al cenizo, su casa no era una opción, no conocía la dirección de la casa de Bakugo, así que la mejor opción era ir a un motel y dejar ahí al cenizo.

Motel

Dejo al cenizo en la cama sin zapatos y se dispuso a salir, pero alguien lo agarro de la muñeca con fuerza haciendo que este se detuviera, el cenizo había despertado pero estaba consumido por el celo, no estaba diferenciando entre la realidad y la ilusión. Bakugo cargo a Kirishima como un costal de papas, lo azoto en la cama y se puso encima de este.

Bakugo se acerco a la oreja del pelirrojo susurrándole varios "Ayúdame" mientras le mordía el ovulo de la oreja, Kirishima estaba haciendo lo posible para controlarse y zafarse del agarre del cenizo, pero no lo logro. El mayor estaba sufriendo, necesitaba ayuda, el dolor en el vientre era inmenso y el olor a manzana lo abrumaba, ya con una erección muy notoria el cenizo empezó a restregar su parte baja con la de el pelirrojo.

"Mierda" era lo único que Kirishima podía pensar, las feromonas del contrario eran muy fuertes y el olor a canela se empezaba a expandir por toda la habitación, cuando sintió su parte baja haciendo fricción con la de el cenizo soltó un gemido ronco haciendo que el cenizo se excitara más. Abrazo a el mayor y lo puso abajo suyo, le hizo pregunto si sabia quien era y lo único que este contesto fue un "he, he".

-Mierda, escúchame Bakugo, te voy a ayudar pero después no me eches la culpa.-

El mayor beso a el pelirrojo, este como respuesta tomo su nuca profundizando más el beso, las manos del cenizo recorrían la espalda del contrario, enterrando las uñas en esta mientras se montaba el este, el pelirrojo recorría el torso de este, quitándole la camisa para tener una mejor vista de esta. Lo separo un momento para poder apreciar la vista de este, su torso lucia espectacular, su piel blanca como la nieve con algunas partes rosadas por el calor y esa mirada roja como la sangre que lo intimidaba era hermosa, todo lo que fuera de Bakugo para el pelirrojo era hermoso. Pues desde hace tiempo ya tenia sentimientos por el cenizo, solo que los había rechazado ya que el era un Alfa y según el Bakugo también. Beso al cenizo con mucha pasión y amor, tratando de transmitir sus sentimientos por el cenizo con ese beso.

Bakugo le quito la camisa a el contrario para también poder admirar su torso y jugar con este, el pelirrojo empezó a recorrer el cuerpo de el cenizo con su boca, paso por su cuello dejando algunas marcas y chupetones para bajar a su pecho y empezar a jugar con los pezones de este, ante la vista de el menor eran perfectos, su color rosa haciendo contraste con la piel blanca era perfecto, succionaba y mordía estos mientras que el cenizo no paraba de soltar gemidos que trataba de ahogar con su mano.

Aunque este estuviera nublado por sus sentidos no dejaba de ser competitivo, haciendo una competencia en su cabeza por ver quien de los dos disfrutaría más.

Cuando Kirishima dejo su pecho para pasar a su vientre bajando, el cenizo aprovecho para empujar a este y desabrochar el pantalón del contrario y bajarle el pantalón justo al bóxer dejando libre la erección del menor, lo único que pensó el cenizo en ese momento fue "Que grande", no lo pensó más y puso el miembro del pelirrojo en su boca, empezó a jugar con el miembro del contrario con su lengua, recorriendo desde la parte baja hasta la punta, apretaba con su mano la punta haciendo que saliera un liquido viscoso color blanco, el cenizo simulaba embestidas con su boca, el pelirrojo lo estaba disfrutando demasiado, no paraba de soltar gemidos roncos.

El Alfa interno del pelirrojo le decía que como era posible que el Omega llevara las riendas, no lo pensó mas y empujo al cenizo a la cama, aprovecho y le quito la ropa faltante cuando acabo con el cenizo procedió a quitarse el calzado junto con los calcetines.

Empezó a jugar con la entrada del cenizo, introduciendo el primer dedo, empezó a besarlo y a jugar con su cuello, cuando introdujo el segundo dedo observo al cenizo, viendo como dos lagrimas recorrían su cara, beso sus parpados y frente diciéndole un "Te Quiero", el cenizo lo beso y lo abrazo, se escondió en su pecho y empezó a besar este, Kirishima empezó a hacer embestidas con sus dedos y introdujo el tercero, los dedos de Kirishima eran largos, por ello cuando introdujo el tercer dedo toco por accidente el punto G de este, lo bezo y empezó a quitarse su pantalón.

Cuando considero que el cenizo estaba listo, retiro los dedos, al principio el cenizo sintió vacío y se aferro al cuello de este. El pelirrojo contesto un "Si saque eso no crees que es para meter otra cosa". No quería que el cenizo sufriría así que entro en este de una sola estocada, el cenizo no había sentido nunca ese dolor y placer, al principio no pudo contener unas lagrimas, el menor viendo eso se quedo estático, pues sabia que a un Omega le dolía eso, pasaron unos segundos y el cenizo empezó a mover sus caderas inconscientemente, el pelirrojo tomo eso como una señal para avanzar, empezó a embestir a este y a besarlo.

Pronto el dolor que antes el cenizo sentía se remplazo por placer, quería mas, quería seguir experimentando ese sensación dentro de si, beso a el menor con pasión con lujuria, le gustaban los dientes de este, aunque tenia semejanza a los dientes de un tiburón, a Bakugo le parecían sexys y bonitos. No paraba de jugar con los dientes del contrario, con su lengua, con sus labios hasta con los dedos llego a jugar, llego un punto en el que el placer fue tanto que callo inconsciente, Kirishima viendo esto se detuvo y salió de este, abrazándolo y cayendo los dos en los brazos de Morfeo.