Cuarentena con Samuel (RUBEGETTA) [TERMINADA]

-Raro-

Nuevo día y con eyo vendría una nueva noticia que volvería a cambiar al vida de aquella pareja que tan mala la estaba pasando.
Samel estaba dirigiéndose a la recepción para pedir los papeles de su estudio. Mientras esperaba a su turno se sentó en una de las sillas y miraba su alrededor, solo podía ver caras tristes en las personas. Sentía un mal presentimiento y su estómago se lo había advertido.
-Samel de Luque, ¿lo dije bien?-
Directamente Samuel se levantó y se dirigió hacia la señora. -Si- Dijo Samel con temor. -Soy yo-
-Muy bien, aquí tiene sus papeles.- la recepcionista le entregó los papeles y llamó a la siguiente persona. Mientras tanto Samuel volvió a sentarse y revisar los papeles. Por ningún lado decía que tenía el coronavirus, pero si decía su mayor pesadilla. Samuel no lo podía creer, quedó en shock y comenzó a llorar desconsoladamente, el mundo comenzó a guirar para el hasta sentirse en otro mundo paralelo.
Las personas corrían en reversa, también envés de comer la comida la vomitaban se podía ver como los herbívoros se comían a los carnívoros. Todo lo confundía, pero lo único que veía bien era a su preciado Rubén quien estaba sentados un banco tomándose un café. Samel corrió hacia su novio y algo en la mando de este le llamó la atención, el llevaba un anillo de oro en su dedo. -¿De donde sacaste ese anillo?- Pregunto Samel -¿Como que de donde? Recuerdo haberte visto en mi boda con Silvia...- Samel de asusto ¡No entendía nada! ¡Nada tenía sentido en aquel mundo!
-¿P-Pero como?...-
-¿Samel estas bien? ¿Quieres que llame a Irina?
-A I-Irina?...- dijo asustado mientras llevaba un gran ahogo en su garganta que le impedía respirar bien.
-Si, tu novia.- Samuen sintió un gran dolor en el pecho, estómago y corazón, tenía ganas de vomitar así que corrió detrás de un árbol para vomitar, pero expulsó de su cuendo la bilis, un líquido algo espeso y amarillento. Rubén seguía sentado en aquel banco sonriéndole a la nada misma. Samuel se limipo la boca y le pidió un poco de agua, Rubén le dio una botella y Samel se la tragó entera, pero quedó en shock al ver el fondo de este con unas pestillos húmedas, miro a Rubén asustado y el menor le dijo -Aveses es más fácil quitar el dolor que guardarlo- el mundo volvió a guirar y el volvió a caer inconscientemente al suelo.

El mar salado... podía sentir agua apoderándose de sus orificios primero fue la boca, despues la nariz y las orejas... ¿su cuerpo? Su cuerpo era uno con el mar, le pertenecía al mar, cada ves veía menos y sus ondas vitales iban disminuyendo.
Y su pulso apenas podía funcionar, pero el, el solo pensaba en su amado Rubén, la sonrisa que regalaba al mundo cuando estaba de bueno humor, o el puchero que hacía para conceguir lo que quería, su voz, su voz la sentía tan serca que la buscaba con su pocas fuerzas. Los peces comenzaban apegarse al mayor y buscar restos de basura para comer. El seguía bajando hacia las profundidades del mar, sus oídos dolían, la presión del mar al bajar lo mataba aún más, apoyó sus manos en sus orejas. Abrió la boca y dejó que el mar sea uno con su cuerpo y darle fin a este sufrimiento. -¡SAMUEL!-
Samuel se sorprendió y miró hacia arriba viendo la figura divina de su novio. Eso fue suficiente para darse cuenta que aún no debía morir. Intentaba nadar aunque le costase. Algo lo agarro de la pierna, lo succiono hacia le fondo...

-Entiendo... ¿lo pueden traer para acá?-
El doctor entró a la habitación. -Supongo que ya se enteró...- Dijo con un tono de pena y tristeza. -Si, pedí que lo traigan para poder verlo- se acomido en la camilla para que le agan el examen que tenía una ves a la semana.
En la mitad del examen alguien toda la puerta y la enfermera abre para que pasen los que trasladaban a Rubén. -Aun no despierta... ¿cierto?-
-Lo lamentó... aún sigue en desmayado-
-me da miedo que esté de desmayos pase a algo más grave... -
-Haremos lo posible para que esto no se nos vaya de las manos-
-Muchas gracias...-
-El llevaba unos papeles, tome -le entrega los papeles a Rubén y el rápidamente los comienza a leer.

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Hola y chau porque tengo que ir a mimir. •3•