Recuerdos (Las crónicas de Narnia y el viajero del Alba) #3

13

Llegamos la costa, donde ya estaban los demás terminando de juntar provisiones
-Es volcánica, esto fue lo poco que pudimos encontrar- explicó el capitán señalando las canastas, contenían peces, algunos tubérculos y un par de semillas
-Gracias- dijo Caspian
-¿Dónde está Eustace?- preguntó Lucy buscándolo con la mirada
-Pues no está ayudando con esto, eso es claro-comentó Reepecheep
-Ire a buscarlo- dijo Ed y empezó a caminar -Yo te acompaño- agregó Caspian y ambos se perdieron entre las rocas
-Einar y yo buscaremos por el otro lado, ustedes adelántense- ordene, él me pasó la espada que hacer un par de minutos habíamos encontrado en la cueva y junto a mi hermano empezamos a caminar en la dirección contraria.

-Sabes que ella nunca te haría daño- comentó el rey Caspian, el azabache lo volteó a ver
-Si, si lo se. No era ella quien movía la espada- afirmó Edmund mientras esquivaba una piedra
-Y acerca de lo que dijiste... lo de que ahora yo la tenía a ella...- empezó a comentar Caspian pero Ed lo interrumpió
-Tampoco era yo quien hablaba, al fin y al cabo yo tome la decisión de terminar, ella solo lo hizo-
-Kayssa es una hermana para mi, no la veo de otra forma, si eso te hace estar más tranquilo- comentó Caspian y el azabache solo asintió y siguieron caminando bajo el brillante sol en silencio, hasta que el más alto lo rompió
-Ella no quería venir, tenía miedo de que regresaras y no estuviera ahí para ti- dijo
-Lo se, pero no quiero que se sienta encadena a un compromiso con alguien que es temporal, aunque me quedara, ella no envejecerá y yo si, ella jamás dejará esta tierra y yo si; Lo que trato de decir es que quiero que sea libre- explicó el chico mientras se llevaba su mano al pecho para acariciar el cuarzo que aún colgaba de su cuello -Es lo mínimo que puedo hacer por ella- agregó y ambos siguieron caminando en búsqueda de pistas del paradero de Eustace.

-Sentí el cuarzo, aún lo lleva- comente a Einar mientras nos asomábamos por varias rocas
-¡Eustace!- grite en esperanza de una respuesta
-Lo se, lo he visto observándolo, pero no tiene color- dijo Einar antes de gritar el nombre del chico -¿Donde se puso haber metido?- preguntó
-No pudo haber ido lejos- dije acelerando el paso, no sabíamos cuánto iba a durar el buen tiempo así que debíamos aprovecharlo
-Si pudieras ¿Irías con él?- me preguntó Einar y yo paré en seco.
-¿Qué?- La pregunta me había tomado desprevenida
-Si pudieras ir con él, a su mundo y él te lo pidiera ¿Aceptarías?- preguntó de nuevo
-Yo...- No sabía qué contestar, era algo imposible por lo que nunca me lo había planteado
-No- contesté después de un par de segundos
-No podría dejar Narnia aunque pudiera- respondí firme, amaba a Edmund, pero mi Narnia lo era todo para mi.

Pasamos un par de minutos más pero no había rastro del chico
-Ya debieron haberlo encontrado, es mejor que regresemos- dijo Einar caminando en dirección a donde habíamos dejado el bote
-Es espero- empezaba a atardecer y Eustace era muy asustadizo
Caminábamos hacia allá cuando escuchamos un batir de alas y el eco de un grito, instintivamente sacamos nuestras espadas.
-¿Qué...- Pero no pude completar la pregunta ya que un enorme dragón pasó encima de nosotros y pude ver un poco de la persona que traía entre sus garras
-¿Edmund?- pregunté sin dejar de ver a la enorme bestia que sobre voló un espacio durante un par de minutos y volvió a pasar encima de nosotros en dirección al bote. Einar y yo empezamos a correr lo más rápido que podíamos tras de él.
Cuando llegamos Caspian se encontraba ahí y un bote que venía del barco estaba navegando en nuestra dirección
-¿Qué fue lo qué pasó? ¿Y Eustace?- pregunté nerviosa
-No lo encontramos y cuando veníamos de regreso...- No pudo concluir lo que decía ya que el dragón dejó a Ed suavemente en la tierra y este se posaba sobre una roca, era un poco más pequeño que otros dragones que había visto, sus escamas eran de un color entre lo naranja y lo amarillo, que a la luz del sol le daba una sensación de ser de oro y había algo en sus ojos, tenían una calidez y ternura familiar. Volví a sacar mi espada solo por precaución.
Lucy, Gale, su padre y el capitán bajaron del bote y se ubicaron a nuestros lado
-¡No! No le hagan nada- dijo Edmund mientras se ponía delante del dragón en señal de protección, vi como el dragón miraba con miedo las espadas así que tire la mía, Einar y Caspian me siguieron al igual que el resto
-Es Eustace- dijo Edmund acercándose a nosotros
-¿Qué?- preguntó Lucy mientras se acercaba a la criatura que resultaba ser el pobre chico
-Encontramos sus ropas en el tesoro de un dragón- explicó Caspian. Pude ver que algo brillaba en las patas de Eustace, era una especie de brazalete que se intentaba quitar con su garra de forma inútil. Me acerqué a él, el brazalete ya está a la mitad de la parte superior del músculo
-Quédate quieto- le pedí para poder jalarlo, cuando salió, Eustace lanzó un gruñido de dolor, le había dejado un rasguño
-Ya está- afirmé y regrese con los demás
-Bueno, todos saben que no debes robar el tesoro de un dragón- dijo Caspian, Eustace bufo inconforme -Bueno, lo que habitan en Narnia- agregó
-Creo que es claro que no lo podemos llevar en el barco- comentó el capitán
-No lo dejaremos aquí- afirmó Lucy
-Pasaremos aquí la noche, ya mañana continuaremos- Ordenó Caspian
-Pero no tienen con qué calentarse majestad- comentó el padre de Gale preocupado y nada más decir esto, Eustace lanzó fuego a un par de ramas secas creando una pequeña fogata
-Creo que ya lo solucionamos- agregó Einar y el capitán nos proporcionó unas sábanas para poder recostarnos con más comodidad. Mi hermano y yo decidimos hacer guardia, Lucy dormía al lado de Gale, Reep estaba junto a Eustace y Edmund y Caspian tenían sus sábanas una al lado de la otra
-Me preocupa volver a perder el control- dije, estábamos en la orilla de la costa, me había quitado mis botas y arremangado mi pantalón para sentir la frescura del agua en mi piel
-No lo harás, así como yo no volver a intentar saltar al mar. No somos así y nuestras tentaciones ya han sido quitadas del camino- Me sorprendía que Einar, quien normalmente estaba bromeando, era de nosotros el más maduro
-¿Cómo estás tan seguro?- No me sentía segura, tenía miedo de que pudiera perder el control de nuevo, no quería volver a hacer daño
-Edmund no se llevó nada de la cueva, Caspian ya no tiene pesadillas, yo no me aventé del barco y tu no mataste a nadie. Lucy en realidad no me ha querido contar de cual ha sido su problema por más que le he insistido, pero sé que ya lo enfrento- Explicó, lo cual me hizo sentir un poco más tranquila
-Ve a dormir, yo seguiré un rato más- le dije a Einar y sin decir palabra se levantó y dirigío con los demás.
Me quede un par de horas ahí, viendo y sintiendo el mar, admirando el brillo de la luna y las constelaciones que la acompañaban hasta que sentí el peso del cansancio sobre mis huesos. Me levante y tuve que usar cada músculo de mi cuerpo para resistirme el acurrucarme junto a Ed, en cambio me acerqué a Lucy y Gale y dormí a sus espaldas, alejando mi espada lo más que podía.