- Oye wey, no se supone que debería ir a mi habitación.
- Por eso mi amor, desde ahora está será nuestra habitación.
- E-eso quiere decir que dormiremos juntos.
- Claro México.
- ¿¡ Que chingados haces !?
- Me estoy preparando para dormir.
Rusia se estaba quitando la playera, ya que acostumbra dormir solo en boxer.
- Tranquilo, aún no haremos nada.
- Wey ya.
- Quítate la ropa.
- ¡¿Qué!?.
- Tranquilo, no te aré nada, solo que así será más cómodo dormir.
- No lo sé wey.
- Quitatela.
- Ok, ok, ya voy wey.
México se quitó su playera y su short, recién confeccionado y se acostó junto a él ruso.
- Puedo abrazarte México?.
- Sí quieres, pero ya no estés chingando, quiero mimir we.
Rusia abrazó al Mexicano, durmiendo como "cucharita". Rusia no podía creerlo, tenía a su querido México en sus brazos, podía hacer con el lo que el quisiera, pero no quería lastimarlo, quería protejerlo, amarlo, y que el lo amará también.
A la mañana siguiente
- México, cariño, despierta ya es de mañana.
- Ay mi amor no estés chingando.
- Me llamaste amor, puedes repetirlo.
- Ay, si si ya, orita me paro.
Rusia se sonrojó, su querido Mexicano lo llamó amor, era una de las cosas que más deseaba.
- Ya estoy aquí, que desayunar emos.
- Pues, no lo sé México, la verdad, esperaba que cocinaras tú, eres muy bueno en eso.
- Obvio, y no solo en eso, ok, yo cocino.
México se acercó a la cocina tomando los ingredientes.
- Te aré... Unos huevitos rancheros wey saben bien mamalones.
- Ok México, en lo que preparas iré a darme un baño.
- Si, si ya a la chingada.
En el baño de Rusia
-
Ahora que voy a hacer, si me descubren, no quiero ir a la cárcel, no quiero que me quiten a mi hermoso taquito. Pensaba el ruso, pero fué sacado de sus pensamientos por un gritillo.
- ¡Ahhh, NO MAMES!
- ¿¡ México!?
Rusia salió corriendo del baño desnudo para ver qué sucedía.
- ¡ Méxica! ¡¿ Que te pasó!?.
- Nada wey... ¿Por qué estás desnudo y empapado?.
- Es que te escuché gritar.
- A, eso, es que me tiré un poco de salsa ensima y me manché.
- No te preocupes, te daré más ropa, pero no me asustes así ok amor.
- Ay, perdón, oye te molesta si pongo música.
- No para nada.
- Ok, hasta me voy a poner a bailar wey.
- Entonces me apresuraré para verte mi amor.
- Pos apúrate por qué voy a poner la chona.
-¿Quien?
- Es una canción.
- A, espérame no me tardo.
- Pues ya que.
Pasaron 5 minutos y Rusia ya estaba vestido y toda la cosa.
- Ya estoy listo, podrías empezar.
- Obvio.
- Wow, es una buena canción. Y como se baila.
- Es quebradita wey mira ven te muestro. Tengo que poner mi mano en tu cintura, tu mano en mi hombro las manos así, y más que nada es dar giros y vueltas saltando.
- o, ok
- Mexica, estoy mareado.
- Es normal, es tu primera vez, te seguiré enseñando. Y después será payaso de rodeo.
