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Han pasado semanas desde aquel encuentro tan raro que tuve con Jotaro ... Mi cabeza es un desastre, he tenido roces incomodos con Kakyoin e incluso con Joseph, no sé que está pasando, y quiero saberlo, esta sensación rara simplemente no sé va. ¡Incluso con Keith es así!, su fachada de chico feliz se siente falsa por alguna razón, y no puedo comentárselo. Quiero hablarlo con mis padres, porque notan que estoy rara, pero no puedo, porque me da miedo que me vean como una loca, o que se metan con Holly, los Joestars en general, ese es mi pavor. Debo saber que pasa, incluso si me rompo la cabeza pensando en que será o en adivinándolo, aunque mi corazón como mente se rompan descubriéndolo, es necesario que lo sepa, en verdad, si no lo sé, no podré romper está barrera de silencio que rodea a todos los que conozco; debo saberlo, pero, ¿Cómo?, no sé me ocurre alguna idea que me deje saber que es lo que está pasando en estos momentos. El tiempo me parece que va tan lento, a ritmos que me preocupan, es casi como si fuera así a propósito para que me olvide del tema.

Espera, debe ser eso ... Tiempo ... Esa palabra me causa una sensación que no soy capaz de poner en palabras, pero me hace tocar donde están mis cuerdas bucales con un sentimiento de asco que jamás creí sentir en mi vida. Hasta creo que quise vomitar, y no sé porque. El punto es que, ahora que sé de los stands gracias al señor Joestar, y la partida de Avdol junto a Polnareff para investigar sobre la flecha que me ataco, creo que estoy empezando a unir cabos de una buena vez, tras todo este plazo de días pensando e investigando. No creo que mi hipótesis este correcta, pero es la única que viene a mi mente en un momento de iluminación como calma en este preciso momento; debe de haber un usuario que retroceda el tiempo para lograr algo, y como consecuencia, deja una sensación de deja vú por nuestros cuerpos ... No estoy segura de si es así de simple, tal vez hayan matices que no conozco o reglas que conlleve usar ese poder que me son desconocidas, pero me hace mucho sentido, al menos a mí, hasta creo que puede que eso este pasando, ahora la cosa es adivinar quien es, y que deberé hacer cuando lo descubra, porque no sé como tratar a un viajero del tiempo en realidad, ya que nunca he tratado con uno en toda mi vida, tampoco sé como vaya a terminar aquello en realidad, a decir verdad, encuentro bizarra toda esta situación, es casi irreal para mí. Saber del hamon ya era raro, ahora saber de los stands y que poseo uno lo hace el doble, y se convierte en una cosa bizarra: Sabía que mi vida tendría un giro así, pero no pensé que ahora pasaría, a mis 18 años de edad.

Simplemente me queda arreglarme con mis ropas favoritas, mi cabello en el estilo que me gustaba, ponerme el sombrero y salir de la casa. Acomode mi cabello para que no me saliera disparado a la cara el mismo por la brisa del mismo, es sábado, no debe preocuparme mucho de lo que sea que pase en este día aparentemente fresco como tranquilo; los usuarios stand se atraen entre sí, por lo que sé, debería de ser fácil encontrar alguno. Saco mi stand, lo miró y comienzo a caminar, es una manera de gritar que quiero que me maten por lo que sé, según las explicaciones del señor Joestar, pero aunque me esté exponiendo a un peligro muy grande, valdrá la pena si descubro que rayos pasa. Keith pasa delante mío, su mirada no denota sorpresa, pero noto que se muerde el labio, se me hace curiosa esa reacción suya, busco en su mirada algún indicio que me diga que le pasa, pero nada, no observo nada, su mirada vacía no me deja ver que realmente siente y eso se me hace a medias familiar, siento que ya lo he visto esto antes; para el paso y me observa mejor, me sonríe, pero esa sonrisa no me provoca nada de calma o felicidad, siento que es de esas que son falsas y tratan de convencerte de que están bien, pero la realidad es otra, creo que mi mirada desaprobatoria le dejo aquello en claro, que sé lo que pienso y borra su sonrisa, el dolor en su mirada es algo que se siente genuino, su stand se deja aparecer, el mío se le acerca, parece que él empieza a llorar por un motivo que desconozco, pero quiero saberlo por algún motivo. Esto se me da mal, pero no me parece que haya otra opción realidad, sólo lo abrazo, y oigo que esos sollozos se vuelven más sonoros, la fuerza con la que me abraza es considerable, se está aferrando a mí, murmurando cosas que se me hacen inteligibles, pero estoy segura de que están llenas de mucho dolor contenido por alguna razón.

Acaricio su espalda, trato de consolarlo, pero no sé si eso está funcionando realmente, creo que lo estoy haciendo peor, ah- vaya, nunca creí que ni bien lo viera está reacción fuese a ocurrir, pero ya que, hay cosas que realmente son una sorpresa a la que no nos es facil anteponernos.

─ Perdóname ... Sólo quise protegerte y termine haciendo raras las cosas con todos. ─ Lo que dijo no tiene sentido, no entiendo de que quiere que lo perdone, tampoco sus lágrimas tan estruendosas, o su mirada dolida, pero puedo ver que es serio y que le duele mucho, creo que hasta demasiado, a niveles que no debería ser posible. 

─ Aunque debería ser normal ... Después de todo, ¡No vivimos en el mismo tiempo!. ─ Todo hace sentido cuando grita aquello, bueno- ¿Cómo es que no lo intuí?, siempre fue el más raro de todos mis presentimientos generales.