¿Qué puede pasar en un plató de rodaje?
🎞
Narra Natalia
Me di la vuelta en la cama y me abracé con más fuerza a mi almohada, pensaba quedarme así por horas. El frío acababa de llegar a la capital española y no había un mejor lugar donde estar que acostada en la cama. Sin embargo, mi sueño se vio interrumpido por mi teléfono.
Di un bote en la cama ya que no me esperaba el sonido. Tardé un par de segundos en darme cuenta de que no se trataba de la alarma sino de una llamada de teléfono. Bufé frustrada al ver que podía haber dormido cuarenta minutos. Cogí el teléfono y vi una llamada entrante de Marta.
-Marta, ¿qué pasa?- Pregunté algo alarmada por su llamada a esas horas.
-Nada, es que estaba nerviosa y te he llamado.- Soltó mi amiga emocionada.
-Marta que estaba durmiendo.- Me quejé dejándome caer en la cama de nuevo.- Tenía puesta la alarma para dentro de cuarenta minutos.
-Ya Nat pero, ¿es que no estás emocionada?- Me preguntó mi amiga y casi pude ver como daba saltitos en su casa.
-Pues claro Marta pero es que ayer llegué muy tarde a casa y no he dormido mucho .- Dije frotándome los ojos con mis pulgares.
-¿No crees que trabajas demasiado?- Preguntó Marta con cuidado, era un tema sensible para mí.
-Sabes que no puedo permitirme el piso sino trabajo.- Rodé los ojos levantándome de la cama.
-Ya pero estoy segura de que si les dices a tus padres que te envíen más dinero, lo hacen.- Comentó mi amiga y yo negué con la cabeza.
-Ambas sabemos que no Marta.- Suspiré jugando con mi septum.- Mis padres me dijeron que si quería estudiar cine que allá yo. Sabes que me envía el dinero muy justo y como no trabaje no sé que haré.
-Tus padre no saben lo que se pierden.- Dijo Marta para animarme logrando que me saliera un sonrisa.- Tienen lo mejorcito de todo Pamplona.
-Ay Marta.- Reí por la intensidad de mi amiga.
Hablamos un rato más hasta que colgamos para ponernos en marcha. Salí de mi habitación para ir a la cocina saludando a Fígaro en el camino. Le di unos cuantos mimos a mi gato y le puse comida. Yo por mi parte me preparé unas tostadas de aguacate con tomate y café con leche.
Desayuné tranquilamente pues iba con mucho tiempo pero tampoco me entretuve, no quería llegar tarde. Dejé los platos en el fregadero y me metí en el baño. Me di una ducha rápida y salí envuelta en una toalla en dirección a mi cuarto. Miré mi armario decidiendo que ponerme. Finalmente me decidí por una camiseta de manga corta blanca y unos baquetón negros rotos por las rodillas. Por encima me puse una sudadera negra para no helarme.
Ese día íbamos a empezar con la practicas de cine. Habíamos tenido una suerte de escándalos porque estaban grabando una película en la ciudad y habían accedido a que hiciéramos las prácticas allí. Estábamos todos muy emocionados por poder trabajar en una película de verdad aunque lo más seguro es que no hiciéramos nada importante.
Además, todo era más emocionante desde que nos dijeron quien ere la protagonista de la película. Alba Reche, la gran Alba Reche. Había visto algunas películas de ella por Marta que era súper fan. A mí parecía una actriz maravillosa y además era súper guapa. Por lo que tenía entendido, tenían dos años más que yo así que calculaba que tendría unos 23 años. Iba camino de convertirse en una de las mejores actrices de España y a nivel mundial a tan poca edad.
