Viviendo con los princesos

EXTRA

Esto es un capitulo random que tenia escrito y no había publicado, perdón por no actualizar, me quede sin celular:(((

Espero que les siga gustando la historia tanto como a mi me gusta escribirla:D

LAS AMOOO.

Pd: que alguien me de un celular. 

Requisitos: te lo suplico

XXXXX

Después de una tarde de hacer estupideces con las chicas, Matheus volvió a dar todo un hermoso discurso de cuanto me quería. Ains, ese niño me hará morir de amor.

Llego la noche y me acoste temprano ya que mañana tenía que presentar un examen. Aunque igual me desvele leyendo novelas en Wattpad.

A la mañana siguiente hice toda mi rutina, y baje las escaleras para irme a la escuela. Para mi sorpresa solo se encontraba Matheus, y parecía estar esperándome.

Cuando noto mi presencia me dedico una hermosa sonrisa para luego darme un beso.

—¿Y los chicos?—pregunté extrañada.

—No iremos a clases hoy, vamos a jugar paintball.

—¿Disculpa? ¿Tu no vas a ir a estudiar?

—Amm, nope.

—Tienes que estudiar, por Anthony no me preocupo porque es un come libros. Pero tú ya vas mal.

—Solo será hoy, amorcito. No me quiero perder esto—dijo mientras fingía estar triste.

—Como sea—me encogi de hombros—, tú eres el que va vivir en la calle recogiendo latas.

—¿Qué? Pero si tu me vas a mantener, ¿no?

Me límite a sacarle el dedo del medio.

—Llegaré tarde por tu culpa.

—Me levante para llevarte, dah.

El camino a la escuela fue rápido.
Cuando Matheus aparcó su carro en la entrada note como Beckam y varias chicas se quedaban viendo a nuestra dirección, queriendo saber quién era yo.

Le dí un buen beso a Matheus para que les quede claro que soy su novia, y entre a la escuela mientras las escuchaba murmurar cosas que no logré entender.

En la primera presente mi examen y saqué 08/20. Ash, lo intenté.

Me pareció raro que Daniela ni Jenniffer hubieran llegado, perdieron la nota por no presentarse.

Estaba por dirigirme a la cafetería cuando Beckam y su combo de perras me detuvieron.

—¿Cual es tú problema?—pregunto Beckam.

—¿De que hablas?

—Crees que puedes llegar y quedarte con Matheus así como si nada. ¿Crees que vas a durar mucho contigo?

—Eso a ti no te incumbe.

—Preguntale a quien tu quieras. ¿Con cuantas chicas ha estado Matheus?

Quise seguir mi camino pero una de las chicas—o mejor dicho mujersuelas— me lo impidió.

—Dime, Meghan. ¿A que sabe mi vagina? O la de Emily, la de Samantha, la de Stefany.

La rabia se estaba apoderando de mí, ganas de golpearla no me faltaban. Pero no, no voy a caer tan bajo, no voy a permitir ser el chisme de la semana en el instituto.

¿Por que hacía eso? ¿Solo para hacerme sentir mal?

Matheus