-¿Tienes que llevar las esas gafas de sol incluso ahora?- la pregunta fue hecha por Carlo, por supuesto.
-¿Tienes que intentar tocarme las narices incluso ahora?- respondió ella, poco impresionada.
Le hacían sentirse segura llevar esas gafas, no es que las necesitase pero las usaba cada vez que tenía que salir de donde sea que se estuviese quedando. Y cuando estaba con gente sobretodo. Tampoco le iba mal que esas no eran unas gafas de sol normales, fueron diseñadas para ayudar a adaptar su visión en la penumbra, a no empañarse y a evitar que la luz del ordenador le diese dolor de cabeza aunque se pasase horas frente a la pantalla.
-A dos minutos- avisó Lucas-. ¿Situación?
-Ningún cambio- dijo ella manteniendo un ojo en las cámaras-. Apagad los teléfonos. No nos interesa que capten nuestra señal.
Carlo dio la orden a los otros cuatro coches antes de colgar su propio teléfono. No sabía si tenían algún sistema que les avisase cuando alguna señal exterior se acercaba y no correría el riesgo de que les atrapasen por algo tan tonto. Prefería pasarse de precavida.
Dejaron los coches a un kilómetro y medio de las vallas que rodeaban Tarcis. Gio hizo un barrido general en busca de sensores de movimiento o trampas pero solo habían unas pocas repartidas a lo largo de la valla, ninguna en medio del punto en el que estaban ellos y la alambrada. Deberían estar a salvo de hacer saltar algún sensor siempre y cuando no se separasen. Cerró el portátil, aceptó una de las pistolas que le dieron, se aseguró que estuviese cargada y con el seguro puesto antes de guardarla. Cogió la mochila con uno de sus ordenadores y se pusieron en marcha.
Llegar fue fácil pero cortar el material del que habían hecho la valla sin ser vistos ni oídos fue un poco más complejo. El tiempo seguía corriendo pero cuando hicieron el agujero Carlo no dio la orden de continuar con el plan.
-¿Por qué no atacamos sin más?- preguntó Rice al cabo de un rato-. Los guardias son unos holgazanes que no prestan atención. Podemos dispararles y correr adentro.
El EPL insistía en esperar a que uno de los guardias se alejase de las puertas o entrase. Habían contado a tres de ellos, dos frente a las instalaciones y uno en el primer piso, paseando por la pasarela exterior con un móvil en la mano. Gio había pensado en hacer saltar uno de los sensores para que concentrasen su atención a la zona equivocada pero el resto no quería arriesgarse a que bloqueasen las puertas y que mientras ella la conseguía abrir hiciesen daño a los Layas atrapados o huyesen.
-Necesitamos pillarles por sorpresa- dijo Lucas.
-Pegarles un tiro les pillaría por sorpresa- siguió Rice.
-Se trata de que no avisen a los demás.
-Puedo falsear la señal de las cámaras- ofreció ella-. Les puedo poner imágenes en bucle y que crean que todo sigue bien mientras atacamos a los guardias.
-Si algo sale mal podrían avisar a los del interior. No nos vamos a arriesgar, no con las vidas de tantos años esté en juego.
¿Por qué no podían centrarse en el jodido plan que habían trazado? Si fuese así ya estarían adentro pero Carlo insistía en que había algo raro y no debían precipitarse.
En el camino a Tarcis Gio había estado comprobando que todo seguía en orden dentro de las instalaciones. Los guardias seguían haciendo sus rondas con normalidad y no se veía ningún tipo de seguridad extra o algún empleado actuando de manera extraña. Solo Frankel, que se había estado paseando por los pasillo hablando por teléfono, seguramente manteniéndose informado sobre lo que pasaba en Corhnas.
KAMU SEDANG MEMBACA
LAYA Sharp (2º )
FantasiFue creado en un laboratorio, y ha pasado toda su vida encerrado en una celda, siendo tratado más como un animal que como una persona, y usado para experimentar los efectos de cientos de medicamentos. Sharp fue rescatado junto a un grupo de Layas...
