Encuentros Por Accidente (Viaje En El Tiempo) (Tres Generaciones Harry Potter)

Capítulo 5 Los futuros Potter's

Después de que se fuera Lunático, el siguiente subió. Caminaba muy seguro de sí mismo. Ya en la tarima dijo:

-Hola futuro. Es placer para ustedes conocer al máximo, único y perfecto...

-Tu también te vas a poner así?- gritó uno de los encapuchados, pero está vez no era uno de sus amigos, pero desde que llegaron no había hablado.

-Cállate Malfoy!- al decir esto, a los Malfoy del futuro el estómago se les revolcó. No podía ser...

-Bueno, continúo... El gran... James Charles Potter- se quitó el pulso y dejó a la vista un chico de cabello rebelde color azabache, tenía ojos pardos. Para sorpresa de muchos, miraron inmediatamente hacia Harry, y Ron rompió el silencio.

-Harry, tienen razón eres igualito a tu padre, excepto en los ojos.

-Hola hijo!- grito James desde donde estaba.

-Hola papá!-respondio Harry

-Bueno... Sigo... Tengo 17 años. Pertenezco a...- hizo una pausa dramática- Gryffindor -la casa aplaudió, pero nadie como Harry y los Weasley- Bueno, eso no es novedad, todos los Potter son Gryffindor.

-Yo no estaría muy seguro de eso!- dijo uno de la tercera Generación.

-Bueno, entonces como todos los Potter hasta ahora- se corrigió James.

-Estoy en el equipo de Quidditch, soy el capitán y juego como cazador- los fanáticos del juego volvieron a aplaudir- tengo que admitir que desde que estoy al mando hemos hecho sufrir a las repugnantes serpientes.

-Ya quisieras tú Potter!- gritó uno de los encapuchados.

-Te da miedo admitir las derrotas rubio oxigenado- respondio este

-Es rubio natural ignorante-dijo otra vez

-Ya quisieras tú Malfoy.- respondió James

Pero el encapuchado no iba a seguir gritando, ya tenía la varita en mano para cuando los encapuchados de la tercera generación que estaban cerca gritaron

- Moco-Murciélago- dijo una que parecía ser hembra

- Expelliarmus- dijo uno

- Petrificus Totalus- dijo otro

-Te vuelves a meter con mi abuelo y...

-Lily!!! -no pudo terminar la anterior porque le gritaron.

-Ups, lo siento mucho chicos- y como si no hubiese ocurrido nada dijo- continúe

- Bueno les decía que soy fantástico, lo se.- dijo arrogantemente James

-Sigue estúpido- gritó Lily E, lo cual causó risas en la tercera generación, pero a pesar de todo, en esta se podían ver algunas lágrimas, por parte de los mini Potter's, no tan pequeños en edad, sino en generación.

Mientras que Harry hacía lo posible por no llorar, pero fue en vano, pues tenía los ojos cristalizados, cuando sintió una mano sobre la suya propia. Miro hacia atrás y estaba Ginny, que se sentó a su lado, ella le limpió las lágrimas, le dió un beso en la mejilla y le dijo en el oído

-Tu puedes, aprovéchalos y conócelos mientras están aquí. Esto no se da dos veces en la vida.

Harry asintió con la cabeza y volvieron a centrar la vista en su padre.

-Bueno, soy parte de los Merodeadores, me llaman Cornamenta. Soy un animago, de ahí mi apodo. Mis mejores amigos son Remus y Sirius. Y me falta algo? Ah pues bueno, cabe decir que soy novio de Lily, con quien evidente tendré un hijo. Si no hay nada que preguntar, que lo dudo, pues soy del pasado, me voy.

Bajó para sentarse al lado de su hijo, cuando subió otra persona, no se veia, pero por la manera de caminar se notaba que era una chica. Dijo la joven

-Hola a todos, yo soy... Lily Evans- al quitarse la pulsera dejo ver una muchacha de pelo rojo y ojos jade y buen cuerpo, su belleza hizo suspirar a los estudiantes, poniendo celoso a James, al punto que gritó

-Ella puede ser su madre estúpidos.

Cuando Lily miró a su novio también dirigió la vista a la mesa de profesores, y vio personas con lágrimas en los ojos, entre ellos Snape (el cual no se dejo ver bien las lágrimas porque se las limpió en un instante), Flitwick (profesor de encantamientos), Hagrid y Slughorn, el cual era un profesor que le tuvo muy buena estima en sus años de estudiante. Ella se dió cuenta de que todos lloraban, pero no sabía el motivo, pero tampoco iba a preguntar en ese mismo momento, no lo creía adecuado.

-Bueno... Tengo 17 años, estoy en Gryffindor - y la casa volvió a hacer ruido- no jugué Quidditch pero siempre iba a apoyar a mi casa, y a partir de este curso, ha sido casi una obligación, pues James y Sirius no me permiten una ausencia, pues dicen que están muy cerca de la "gloria"- dijo haciendo comillas con los dedos.

-Claro amor, tienes que ver nuestro triunfo- dijo James a lo que Sirius afirmó con la cabeza.

-Si, bueno, soy Prefecta y Premio Anual...

-Prefecta perfecta- la interrumpieron otra vez.

-Si, bueno como sea.- pero algo más paso, ella visualizó a su hijo llorando, pero ya no podía aguantar más la pregunta y dijo

-Harry cariño, por qué lloras? Tan malos padres somos?

El aludido miro a Dumbledore y el asintió con la cabeza, se lo debía decir, y lo intentó, pero ninguna palabra salia, hasta que Ginny le tomo de la mano, y le dió fuerzas y logró decir

-B-bueno mamá, p-papá, es q-que, ustedes están.... Muertos.

Dijo esto y salió corriendo fuera del Gran Comedor llorando. Lo iban a seguir, pero Ginny dijo

-Voy yo.- y su familia afirmó

La pelirroja lo buscó por todos lados, e incluso la cancha de Quidditch, hasta que fue a su lugar favorito, el Lago, y allí es donde estaba.

Se veía que lloraba y estaba lanzando toda la piedra que tuviera cerca hacia el lago. Ginny se acercó hacia él y le preguntó

-Puedo hablar contigo?

-Si- él no podía negarle nada a la mujer que lo volvía loco (aunque ella no lo supiera totalmente)

-Mira Harry, sé que es difícil, y no te puedo decir que te comprendo, porque no tengo la más remota idea de lo que sientes, pero solo te puedo decir que necesitas volver, hablar con tus padres, conocerlos, pues ellos murieron por salvarte y tú te has pasado los 16 años que tienes luchando contra Voldemort, de alguna manera la vida te ha recompensado con conocer a tu familia, aunque ser por breve tiempo, así que aprovecha, pues esa es tu familia biológica, la cual no tienes, pero cuando te sientas mal, recuerda que también estamos nosotros, los Weasleys. Aún recuerdo el día que nos conocimos, tus primeras vacaciones en mi casa  y como mi madre te acogió. Ven conmigo.

A lo que Harry sonrió y le dió la mano a Ginny y volvieron al gran comedor. Cuando entraron estaba servido el almuerzo, pues se habían pasado la mañana con las presentaciones.