✨Resplandor✨

Que tanto nos ahorarriamos si supieramos las intenciones de los demás

- Chicos, el es Jacob, mi mejor amigo - rompí el silencio
- Jake, ellos son Noah, Samantha y Michael- Los presente
- Mucho gusto, Jacob - dijo Samantha con una leve sonrisa y extendió su mano
- Hola - dijo Jacob rechazando el saludo y poniendo una mano en mi hombro
Me sentí muy incomoda ante el comportamiento que tomo Jacob
- ¿Quieren ir a comer algo? - dije rápidamente mordiéndome el labio de los nervios
- Si, muero de hambre - dijo Noah  divertido mientras los demás sonreían levemente.
Después me percaté de lo estupido que había sido mi comentario.
- Nosotros te esperamos en el coche - dijo Samantha dirigiéndose a su asiento. Sus hermanos imitaron su acción.
Tome la mano de Jacob y lo aleje un poco de donde estábamos
- ¿Estás bien? - dije algo disgustada
- ¿Porque no debería estarlo? - seguía serio
- ¿Porque actúas así? - reclame
- Sabes que no me agradan los chupasangres, a excepción de tu familia claro
- Jacob, son amigos de mi familia, al menos trata de darles una oportunidad
- No hay chance, lo único que puedes esperar de mi es que los tolere, pero no que sean mis amigos - hizo una mueca
- Bien - suspire. No había razón para pelear, y tampoco lo podía obligar a hacerse amigo de ellos
- Ven conmigo- sonó ya más tranquilo - yo si puedo invitarte a comer - sonrío
- No puedo Jake, le dije a papá que los llevaría y traería a casa, mientras llega su coche
Jacob borró de nuevo su sonrisa pero ya no volvió a verse enojado o irritado, solo estaba serio.
- Te extrañe - volvió a abrazarme ahora con un beso en la frente
- Yo igual Jake, no se porque ahora me es más difícil, que no nos veamos - comenté aún pegada a el
- ¿También te pasa? - dijo extrañado quitándome de el para mirar mi cara
- Si - dije confundía
Se le dibujo una sonrisita a Jacob por mi respuesta
- Creo que tendremos que reponer de nuevo los días que no nos vimos - sugirió
- Definitivamente
Nos miramos unos segundos cuando recordé que me estaban esperando en el coche.
-  tengo que irme, ¿no quieres venir?. Podríamos dejarlos y después ir a mi casa para comer algo - sugerí
- Ni loco me subo con esas sanguijuelas- hizo una mueca- déjalo así
- Al menos prométeme que haremos planes para estos días
- lo prometo - dijo rápidamente
- Bien - le sonríe
- Ahora ya vete, antes de que se desesperen - miro de reojo el coche
- Te quiero - dije en voz alta mientras subía al coche
- perdón por tardar - dije encendiendo el coche y saliendo del estacionamiento
Todos permanecieron en silencio hasta que note que tenían cara de desagrado
- ¿Que? - pregunte extrañada
- Por favor ¿podrías bajar los vidrios? - dijo Noah
Rápidamente toque el botón y se abrieron las ventanas haciendo que entrara un aire frío
Todos empezaron a respirar de nuevo
- ¿Que les pasa?
- Perdón Renesmee, pero tú amigo apesta - dijo Samantha apenada
- ¿Que ...? - tarde un segundo para comprender- Ahh, lo siento, se me había olvidado por un momento que Jake era un hombre lobo - dije tranquilamente mientras abría más las ventanas
- ¿Que? - dijo Noah impresionado - ¿Un hombre lobo?
- Si, ¿Que acaso nunca habían conocido a uno? - me sorprendió
- No, siempre pensé que solo eran leyendas y mitos - dijo Samantha rápidamente
- Si, Claro, así como las historias de vampiros - sonreí
- Cierto, no nos debería sorprender qué hay más en nuestro mundo - sonrío Noah
- Y al parecer no le agranda nuestra especie - se dirigió Samantha a mi
- El es ... así, desde siempre, hay ciertas reglas en cuanto a la convivencia de lobos y vampiros
- las reglas que nos dieron ayer en cuanto a territorio y caza - dijo Noah sacando sus conclusiones
- Así es - suspire
Llegamos a la casa por lo que Michale fue el primero en bajar y cerrar con un portazo perdiéndose entre los árboles del bosque
- Perdón en verdad por la actitud de Michael - dijo Samantha apenada - No quería venir
- No te preocupes- la verdad es que entre menos conviviera con el estaría Perfecto
- Bueno, nos vemos mañana - se bajo del coche
- Bye, chica - dijo Noah con una sonrisa y bajando del coche
Por fin iría a casa. Al llegar vi que Jacob estaba hablando con mis papás afuera, por lo que me sorprendí mucho.
- Solo quiero saber cuantos son, y cuánto tiempo se quedarán - escuche a Jacob hablarle fríamente a mis padres
- Llegó Renesmee - dijo mi padre volteando a verme
Me acerque a ellos quienes me dedicaron una sonrisa
- ¿Que tal la escuela? - pregunto mi madre acariciando mi cabello
- Bien, los chicos ... me cayeron bien
- Me alegro - sonrío Bella
Mire a Jacob extrañada para que dijera algo. Al cruzar miradas agacho la cara
- ¿Entonces? - suspiro - Necesitó saber, Sam también tiene derecho a saberlo - volvió su expresión dura
- Jacob, ahora no - dijo Edward volteando a verme
- Papá, sabes que no me gusta que me traten como una niña, esta bien, yo no interfiero en lo absoluto en sus planes - reclame al saber que evitaba que Jacob hablara frente a mi
- Es que, ¿Que planean? ¿Que haya un vecindario de chupasangres aquí? - dijo Jacob  disgustado sólo dirigiéndose a mis padres
- Jacob, están aquí porque no pueden quedarse más tiempo en donde vivían, Carlisle es muy buen amigo del padre de los chicos, se ofreció a darles asilo - respondió Bella
- Ademas no causarán problemas, también tienen una dieta de solo animales, ya les explicamos todo sobre el territorio y la caza.
- ¿Saben que existimos? - pregunto Jacob
"Ya lo saben" pensé
- Tú olor te delato, Renesmee les contó de ti - dijo Edward
Jacob me observo un segundo pero definitivamente no se enojo conmigo
- ¿tiene algún problema que sepan de ustedes? - le pregunte
- No ... - dijo tranquilo - solo que hubiera estado bien que no supieran, así por si rompen las reglas, podríamos darles al menos un buen susto - rio a medias
- Tranquilo, Jake, se ven que son muy buenos - trate de convencerlo
Jacob solo alzó la ceja
- Espero - suspiro - Bueno, era todo ...
- ¿Me puedes acompañar a comer? - dije rápidamente - ¿puede verdad? - pregunte a mis padres
- Seguro, cariño- sonrío leve mi madre
Jacob sonrió agradeciendo y ambos nos metimos a la casa dejando a mis papás solos.

Jacob
Renesmee parecía muy feliz con mi presencia, y la verdad yo estaba igual, todo estaría perfecto si no fuera por lo incómodo que era al tener los ojos pegados de Bella y Edward hacía mi mientras comíamos. Trataba de ignorarlos y ponerle toda mi atención a Nessie, pero era inevitable. Estos días, en los que estuve casi totalmente desconectado de mi vida humana, sentí que me perseguía el pensamiento negativo que nació desde la pelea que tuve con los padres de Nessie. Al principio tenía mucha ira, miedo e impotencia por lo que me habían pedido en ello. ¿Porque no me dejaban estar con ella? Aún no lo tenía claro, si era por su estupida preocupación de protección sabía que solo sería una duda, más no una afirmación. Ellos sabían perfectamente de cuánto amaba a Renesmee y lo que sería capaz de hacer por verla sana y salva. Como lo pensé desde el día que la vi por primera vez, yo nací para ella, hecho a su medida, y tarde o temprano lo tendrían que entender.
Sabía que Edward estaría escuchando todo lo que estaba pensando así que le hable en mis pensamientos
- Necesito hablar de esto ya con ustedes.
Voltee a ver la expresión de Edward
- Renesmee - hablo Edward - ¿podrías darnos unos minutos a Jacob y a nosotros? - se notaba muy tranquilo
Mire a Renesmee quien solo asintió. Antes de irse quito nuestros trastes sucios de la mesa y los puso en el lavabo
- ahorita te ayudo a limpiar - dije rápidamente
- Bien ... - me miro algo preocupada, no entendía que estaba pasando
- Tranquila, todo está bien Nessie- susurre dedicándole una pequeña sonrisa.
Renesmee me devolvió la misma sonrisa y salió de la casa.
- Bueno - dije sin perder el tiempo - ya me leíste la mente y estás al tanto de todo lo que pienso, ni siquiera tratare de alejarme de ella.
Bella me examinó atentamente mientras Edward estaba como estatua mirando a la nada
- Se que nunca van a entender lo que siento exactamente por Renesmee, pero crean, créanme que no es solo un pequeño romance lo que siento por ella. Bella - la mire fijamente - ¿recuerdas todo lo que te dije una vez en la push? Lo que te conté de Quil y su imprimación.
Bella se quedó callada y solo asintió