Capítulo 18: Segundo cuchillo: Parte 3

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¿Cuándo empezaron a complicarse las cosas?

Shirou resistió la tentación de frotar sus sienes mientras ayudaba a Erina a regresar al dormitorio del campus. Erina se estaba inclinando hacia él, con un brazo sobre su hombro y el otro centrado cerca de su abdomen para centrarse.

Sus piernas se habían debilitado en su experiencia cercana a la muerte y ya había intentado caminar por su cuenta, solo para tropezar y caer con pies temblorosos. Su falda estaba cubierta de barro y la costosa chaqueta de su uniforme estaba rota y sucia con pequeñas manchas de sangre seca de la pequeña herida que había sufrido en el hombro. Afortunadamente, no fue más que un roce, pero el rápido latido de su corazón y la adrenalina aún corriendo por sus venas, significaban que había sangrado bastante.

Shirou presentó 'anemia' como hipótesis de la debilidad física de Erina.

Parpadeó como un búho al darse cuenta antes de hacer una pausa y desenroscar la larga corbata de su cuello. "Esto podría doler", advirtió.

Con el rostro pálido, algo de color volvió a las mejillas de Erina ante la mención del dolor. Su boca ya se estaba abriendo en señal de rechazo, pero sus acciones fueron más rápidas.

Usando el extremo largo y ancho de la corbata, la presionó contra la herida en su hombro y rápidamente pasó el resto de la corbata alrededor de su torso para asegurar el vendaje improvisado. Tiró y provocó un silbido de protesta. Cuando ella intentó abrir la boca de nuevo, hizo un nudo con la corbata y tiró de nuevo.

Ella gritó y lo miró débilmente, antes de finalmente suspirar y escudriñarlo bajo la tenue luz de la luna. Caminaba cojeando, apoyando más su peso sobre él mientras seguían adelante. En realidad, fue más un obstáculo.

Por cada paso que daba Shirou, Erina saltaba sobre un pie mientras el otro iba detrás, con la cara apoyada en el surco de su hombro. Era una posición íntima, y ​​en cualquier otro momento, Erina podría haberse preocupado o al menos haber sido consciente de ello, pero lo personal era la menor de sus preocupaciones actuales.

Shirou le había salvado la vida y había operado en una parte súper secreta del mundo que solo unos pocos selectos también conocen.

Sin que Shirou lo supiera, pero los pensamientos de Erina comenzaron a desviarse por la tangente.

Aunque prefería mangas shoujo conmovedoras, también había leído una buena cantidad de mangas de acción, misterio y sobrenaturales. Toda esta situación era similar a la trama de un manga de supervivencia / sobrenatural que Hisako le compraría en las tiendas minoristas.

Si todas las historias y leyendas se basaban en una gran parte de la verdad, entonces evidentemente, el mundo del manga era tan real como podría serlo, y no se podía negar. Organización secreta, magia, órdenes de matar y un nuevo estudiante transferido que sacude la base de la escuela creada para entrenar a las élites a pesar de que se le negó la entrada al principio. Todo coincidió y simplemente hizo clic en su mente.

Quizás... ¿Quizás ella era la heroína con algún tipo de poder o habilidad relevante desde el comienzo de su vida?

Oooohh. ¿Quizás esto fue todo? Tal vez por eso nunca había podido ser normal a pesar de sus esfuerzos e intentos de escapar de la sombra y la influencia de su padre.

Los labios de Erina se fruncieron con alarma.

¿Qué significó esto para ella? Por supuesto, este momento debe marcar el comienzo de una secuencia de eventos que conducen a desarrollos personales y revelaciones sobre ella y quienes la rodean. Probablemente tenía algo especial latente dentro de ella.

Fate stay: CocinandoWhere stories live. Discover now