O1 » ❛ the box elevator ❜

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CAPÍTULO UNO
El elevador caja.


Cuando abrió los ojos, solo sabía su nombre.

Estaba entre cuatro paredes de metal, llena de cajas que golpeaban sus costados con los extremos. El suelo se movía, sacudiéndose como si estuviera yendo hacia arriba a través de un tornado con forma de cubo. Era oscuro, con poca estabilidad para que sus ojos se acostumbraran a las formas que se ocultaban tras la poca luz; tendría al menos seis cajas grandes a sus lados agitándose de lado a lado, se chocaban contra las paredes y contra ella misma, que estaba en medio, temblando con pocas fuerzas para incorporarse por la inercia que generaba el movimiento.

Otra cosa que sabía, sin pensarlo, es que era una chica. Tenía el cabello largo hasta que le picaron las puntas en la espalda a través de una camiseta de manga larga, luego cubriéndole el rostro y dándole calor hasta pegarse a las zonas con sudor. Mientras sus ojos se movían buscando en la oscuridad, notó formas raras en su interior; no solo era una chica. Habían líneas dentro de su mente, formatos que titilaron y letras rojas que se crearon a lo largo del espacio en negro que decían «SISTEMA OPERATIVO FUNCIONANDO. INICIANDO... », así que descubrió que también podía leer, en su cabeza, como una computadora.

Se revisó, pensando, mientras que el lugar bajo sus pies daba una sacudida y su cuerpo se iba hacia adelante junto a otras cajas, golpeando su cuerpo hasta el cuello, apenas pudo recuperar la postura cuando retazos de la luz aparecieron entre los bordes. Estaba subiendo a algún lugar lo suficientemente luminoso para parecer luz solar, a menos de que, en realidad, estuviera saliendo a la superficie de verdad. Por alguna razón, habría pensado que llegaría a un espacio dentro de otro espacio; una sala con un ascensor, por ejemplo. Ella sabía lo que era un ascensor, y una computadora, sabía que habían muchos países y continentes en el mundo, lo que era una plata, una cocina, sabía cómo hablar y probablemente cómo escribir, pero no reconocía quién era, si tenía familia, cómo había crecido, ni cómo lucía su rostro.

«PROTOTIPO ANDROIDE G.R.K.6.2 INICIADO. NOMBRE: CALYPSO. SEXO: FEMENINO. CARACTERÍSTICAS: POR RECONOCER. RECONOCIMIENTO DE ARTICULACIONES BIOTECNOLÓGICAS TERMINADO. SISTEMA AUDITIVO INICIÁNDOSE. FRECUENCIA CARDÍACA NORMAL». Brilló unos segundos en su mente, con letras en mayúsculas y azules que desaparecieron apenas las reconoció y las entendió. Su nombre era Calypso, pensó.

Hasta ese momento, no había reconocido que no había escuchado nada, luego le perturbó el sonido: como si alguien estuviera rasgando una pizarra con un cuchillo, era una clase de metal golpeando cadenas y poleas, reconoció, por segunda vez, que estaba subiendo. Le causó palpitaciones en la sien por lo que parecieron segundos, hasta que, seguido de una luz verde en el costado de su visión, el sonido se opacó. Con tanto movimiento, habría pensado que sentiría náuseas, pero su estómago no estaba revuelto en lo absoluto, y si algo se movía, era porque no podía controlar la gravedad dentro de las paredes de metal.

Pensó que no tenía voz propia, sino que estaba leyendo dentro de su mente junto a imágenes que llegaban como búsquedas dentro de un archivo. Si pensaba en qué era un elevador, le llegaría la imagen de un cubículo con puertas que se deslizaban entre unas paredes, con espejos y metal, y se elevaba dentro de edificios, junto a una descripción en letras azules que no se tomó el tiempo de procesar. Ese no era el lugar en el que estaba, lleno de cajas, en un cuadrado cuyas líneas se marcaron como 6x6 en su campo de visión, así que tuvo que pensarlo con más fuerza, hasta que las palabras «Ascensor de cargamento» le llegó, sin imágenes, solo una descripción.

Así que estaba ascendiendo en un caja de metal, con otras cajas que parecían tener piedras dentro por su peso. En el costado de sus ojos, dentro de su mente, se iluminó un círculo con números a partir del cuarenta que estaba avanzando, junto a la designación «seg» al costado, viajando lo suficientemente deprisa como para sentir que se quedaría sin saliva al decirlas en voz alta.

SKYFALL, the maze runnerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora