c a r r e t e r a c a r a c a s - l a g u a i r a ⊙ h a n j i s u n g

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A pesar de no estar viéndolo, me resultaba sencillo saber que este momento estaba abriendo el pan con cara de querer arrancarle el cabello a Chan de un solo jalón por lambucio.

Esperé a que terminara de cercenar a la pobre canilla de pan pacientemente, viendo la ventana y disfrutando del asqueroso vallenato que se había colado de la rumba que tenian los vecinos montada.

ㅡListo el pollo, Sung.

Antes de perderle el hilo a la conversación, rebusqué entre mi cerebro y recordé el propósito inicial de la llamada. Me senté en la cama y me puse la sábana encima como si fuera uno de esos trapos que usan las vírgenes para evitar que el aire me pegara a mí y al micrófono del teléfono.

ㅡAjá, cuéntame.

ㅡ¿El qué?

ㅡ¿Para qué coño me llamaste tú, Minho?.

ㅡPara contarte de-, ¡ahhh ya!. Coño, espera ordeno mis ideas.

Yo no sé cómo siempre termino metiéndome en el mismo peo.

Aguardé alrededor de 20 segundos sin emitir ninguna palabra o sonido sin hacer más que escuchar cómo Lee mordía y masticaba casi en silencio el pan posiblemente esperando que no me diera cuenta de lo que hacía en su momento de "ordenar ideas" luego de eso, bebió algo y aclaró su garganta antes de empezar con su historia.

ㅡBueno menor, acomodate porque esta vaina va pa' rato. Aquí va la historia de cómo una caraja me volteó la panqueca en vaina de unas tres semanas y contando, digno de Televen este beta. Pues cómo sabrás acabamos de conocer lo que de verdad es bueno, ese día yo salí tranquilito de mi casa, agarré metro y llegué rápido a Ciudad Universitaria como cosa rara, el peo es que yo andaba vuelto un culo porque no sabía pa' donde agarrar y eso que en la noche Bangchan me había explicado cómo llegar, y como esa jodia' andaba más sola que la fajardo a las tres no tenía a quién preguntarle un carizo, unos minutos más tarde entendí que no iba a llegar a la primera clase y eso que era el primer día, así que procedí a pelar bolas pero fitness porque me puse a caminar para conocer y vaina. No sé cómo llegué yo a una cantina, pero llegué que es lo importante, al lado mio andaba una caraja leyendo un libro, yo esperando a que la vieja de la cantina me pasara la empanada que me acababa de comprar le pregunté a la caraja si sabía dónde quedaba idiomas modernos y tal, ella llega y me responde que no y eso que ella tenía que llegar allá hoy pero como se perdió pa' la verga se resignó y empezó a deambular por ahí, para ese punto yo estaba estilo: "verga, twins", así que le cuento mi historia y ella también pareció trippearsela, después de que me dieran mi empanada me dijo que si quería ir a caminar porai' a ver que cosa buena veiamos y yo acepté porque la verdad no tenía nada que hacer y aún faltaba una hora de clase, después de todo ese revolú logramos llegar a clase y antes de irnos de nuevo para nuestras casas ella me pidió mi número y yo se lo di, beta resumido per-.

Dios mio, ¿pa' qué lo mandaste tan caído e' la mata?.

ㅡ¡¿Me estás diciendo que te enamoraste de la niña en cuestión de un día?!, JAJAJAJA, ¡PANA PA' PEGAO'!.

ㅡNojoda pero déjame terminar, beta resumido pero no terminado, ella más tarde me escribió y yo como no soy tan coño e' madre le respondí y empezamos a hablar, ¿tú puedes creer que yo me acosté a las tres de la madrugada por andar hablando con la pajúa de Ana?, porque yo no, y así fue por lo menos por dos semanas, una habladera de paja todo el tiempo, no sólo por mensaje, sino también en la universidad. Pero de verdad hablamos tanto que en cierto momento me di cuenta que ya me estaba desviando de mi camino de boleta que no se enamora, y desde ahí deje de escribirle porque me dio miedito y todo.