No puedo vivir sin ti (2#)

Movimientos involuntarios

El sol de la mañana se colaba por la ventana de la habitación cada vez que las cortinas se alzaban, por brisa fría que pasaba al no tener la ventana cerrada. Siendo esa luz la que ahora le parecía molesta al pecoso, esa luz del sol resplandeciente caía directamente a sus ojos y estando adormilado eso le parecía muy molesto, incitando que agarrara con más fuerza a almohada que tenía enfrente y ocultara su rostro en ella, acomodándose más en su cómoda cama. Su cabeza le dolía como mil demonios y no era nada agradable.

"Bakugou, te quiero a ti "recordó sus palabras y con ellas todo lo ocurrido con respecto anoche.

Flashback

Su cabeza daba vueltas y, apenas dar tres plazos de la cocina, una flaqueó dispuesta a hacerlo caer y así fuese sida a no ser por Todoroki, quien lo acarro por reflejo al estar más cerca.

—¿Estás bien?— pregunto la castaña. Quiso decir que todo estaba bien para no preocupar, pero su voz no salía, su garganta estaba seca y una sensación que no podía explicar empezó a crecer dentro de él de la nada, segando lo por completo. Veía como todos se preocupaban por él, mientras se acercaban, pero todo le daba vueltas y sus acciones empezaban a hacer involuntaria, como si no pudiera controlarlas por él mismo, mientras un "Kacchan" acompañado de un "tengo que verlo" salía de su boca repetidas veces. Era como si no pudiera analizar lo que decía y solo lo hacía, avergonzándolo un poco por no poder contenerlo, limitándose después de un rato a hablar o por lo menos eso era lo que recordaba.

Cuando menos lo esperó ya se hacía en los brazos de su querido cenizo, que por lo que mudo notar, lo llevaba a su habitación, su corazón se aceleró, el calor natural que desprendía a estar cerca de él era reconfortante al igual que siempre, e Izuku apreciaba cada segundo que esto sucedía.

Izuku se sentía extraño, pero al mismo tiempo estaba consciente de las cosas que pasaban y todo lo que tocaba se sentía tan tangible como si nada malo le entumiese pasando, aunque al mismo tiempo sentía que no era él quien se movía.

— ¿Quieres algo más?— Esas palabras hicieron que regoldara lo que su amigo le decía y el impuso solo salió.

Quiso retroceder al pensar en las consecuencias que esto podía acarrear, pero el deseo de sus sentimientos era más fuerte que su temor por ser rechazado y a pasos dificultosos se acercó.

"Bakugou te quiero a ti" salió de sus labios, sus nervios estaban a flor pero dejaba de hablar, a pesar de ver la cara impactada del contrario por sus acciones y cuando menos lo espero su mano agarro la de Katsuki sin importar que temblara acercándola a su corazón.

"¿Qué quería lograr con esto?" se preguntaba en lo más profundo de su ser, pero no paro.

"tú eres la única persona que puede acelerar mi corazón de este mudo"

Los labios de Katsuki eran suaves. El pecoso por más que el imaginaba esa escena, para el esto parecía irreal, ya que le estaba correspondiendo el beso como si sintiera lo mismo, mientras se aferraba a su cintura sacando un sonoro jadeo de sus labios.

—quiero más de ti — dijo sin pensar —quiero que me toques más.

Ya no podía contenerse, hacer eso era imposible para él, teniendo sentimientos por el cenizo quien solo se maldecía por dentro al notar que Izuku era tan lascivo, siendo incapaz de negarse a su petición.

Izuku mordía sus labios tratando de contenerse, pero esto era imposible si él cenizo se la pasaba devorando su cuello sin compasión con lamidas, mordidas y succionando justamente en una parte,  al parecer sensible para el pecoso.

Las manos de Katsuki recorría todo su cuerpo y estas superan cualquier imaginación, era sus manos reales, era tan calientes y cada vez que rosaban sus cuerpo, una parte de sentido común se iba.

—Izuku yo... —jadeaba con una voz ronca tratando de cohibirse. Izuku no se había dado cuenta que su mano escurridiza está en la parte íntima del cenizo—debemos parar, no estás bien.

—Lo sé... pero estos sentimientos no se van a ir aun así —trataba de acercar para continuar— yo igual quiero estar a tu lado.

La cara de Izuku parecía brillar y eso hizo sonreír al cenizo, sacándole un suspiro —Debes descansar.

Katsuki tenía que hacerle frente a la tentación, no podía continuar aunque quisiera, el pecoso estaba en mal estado y no quería aprovecharse de la situación.

FIN DEL FLASHBACK

Su sonrojo era notable a distancia mientras se regañaba a él mismo por actuar de ese modo, cómo iba a ver a Kacchan después de haber hecho todas esas cosas sin mena, sus sentimientos eran como una montaña rusa que hacían fiesta en su estómago. 

él la había regado  y quería quedarse todo el día en su habitación, pero eso era imposible porque ya era hora de trabajar, así que sin pensarlo más bajo, topándose con un Katsuki callado mientras preparaba el desayuno.

Sus pasos eran silenciosos, pero de igual forma lograron que Katsuki volteara a mirarlo formando entre ellos una concesión al juntar sus miradas.

—Izuku...