EL AMOR DE UN SULTÁN

Parte 40: Familia

1572

Narra Gevherhan

Toda estaba bien, estaba sentado en sus aposentos, cuando Yannet se coloca enfrente a ella, le pregunta que pasa, pues la noto muy nerviosa y preocupada, cuando le entrega cartas en ellas se puede dar cuanta que era de la antigua Valide Ayse Hafsa Sultan, quien se comunicaba con alguien de Venecia, curiosa abre las cartas y comienza leer. Al terminar de leer, Yannet le dice que esas cartas las encontró la semana pasada limpiando sus aposentos en un cofre,  el contenido de la carta Hafsa manda a investigarla a Venecia y Crimea, en Crimea habla del sultán Ann Meñil I Giray y sus hijas la antigua madre sultana y Alda, una niña que se perdió a los 4 años, las pistas que siguió fue que una niña con una características parecidas se encontraba en Venecia, la cual fue adoptada por una familia rica y en el futuro se convirtió en la madre de Graziella, esposa del dirigente de Venecia entre 1520-1542. Luego de procesar la información, se dio cuenta de la verdad, ella era sobrina-nieta de Hafsa Sultan, hija del ex-dirigente de Venecia y y descendente del Khan de Crimea.

Al acabar de unir todo, se levantó y se dirigió corriendo a ver al sultán, no espero que le dieran permiso para entrar solo se metió, al entrar lo vio sentado conversando con algunos pashas y al verla a ella ahí respirando entrecortado, mandó a salir a todos quedándose solo con ella, el le dio la mano y la guío a sentase con él. Le contó todo lo que recién se había enterado, se recostó sobre él mientra este le acariciaba el pelo y la cara, al final se quedó dormida.

Narra Mehmed

Estaba conversando con los pashas cuando su esposa se metió , al verla supe que algo andaba mal, al quedarse a solas con ella, se enteró de lo que la tenía así. Luego de hacer dormir a su esposa leyó la carta, y se preguntó porque su abuela nunca dijo nada acerca de sus sospechas, salió y le dijo a un guardia que mandara a traer a un Ali bey. Al saber que ya llegaba, salió de sus aposentos y afuera le dijo al bey que fuera a Venecia y trajera a la familia Gonzaga Malatesta.

Unos meses después el barco que venía de Venecia llegó a puerto otomano, de ahí bajaron siete personas.  Unos carruajes los esperaba los llevó al palacio, ahí los recibió el sultán, él los llevó a unos salones muy bonitos y llamó a una tal Gevherhan, al voltearse Graziella se sorprendió esa mujer frente a ella se parecía a su abuela y madre, su corazón latió con fuerza.

Narra Graziella 

Hace muchos años ya había envejecido, extrañando a su hija, un día cuando estaba en el patio llego su criada y le dio una carta que venía de Estambul, ella la abrió extrañada, al leer su contenido se dio cuenta quien lo escribía era un comerciante otomano que quería reunirse con ella y su esposo, ella accedió y escribió la respuesta, un día después se encontraba con su esposo esperando a que el comerciante llegará, al llegar le enviaron a sentarse y el accedió, luego de preguntarle por su hija y su desaparición, además de su madre y abuela. Al acabar de contarle lo que el señor pidió, el le dijo que venía de parte del Sultán Mehmed II, el conquistador, que los estaba buscando porque tenía información de su hija, que los necesitaban en Estambul, aceptaron de inmediato, el comerciante se despidió y llamaron a su hijo para darle la noticia. 

Una semana después ya estaban en el barco, con su hijo, su nuera, su nieto y bisnieta. Al llegar los llevaron al palacio de Topkapi, se encontraron al Sultán y el los llevo a ver a su esposa, al llegar a su destino vio a una mujer parecida a su madre y abuela, alta, blanca, elegante y hermosa. Su corazón se paralizó y el les dijo que ella era la Sultana Gevherhan, su hija. 

Narra la Sultana Gevherhan

Sus padres, aquellas personas eran sus padres, la mujer corrió abrazarla y ella le devolvió el abrazo también llorando. Luego de abrazar a toda su familia, se pusieron hablar, se enteró que su única sobrina se llamaba Carlotta como ella se había llamado antes de su captura, quien  tenía 35 y su sobrina- nieta 15. Se quedaron todo un mes con ella, al final su sobrina-nieta se quedó con ella un mes más

Narra Basilio

Estaba contento de volver a ver a su hija lastima que no se podía quedar más tiempo y tuvo que con su familia volver a Venecia, con la promesa de volver otra vez más. 

Narra Federico

Le dio pena volver a dejar a su hermana y su nieta ahí Fiorella ahí.