Are You Addicted? (Volumen I)

Capítulo 165: Llega a ti la violencia domestica

“Señorita.” Bai Luoyin la llamó.

Luo Xiao Yu echó un vistazo hacia atrás y lo miró con una sonrisa; Bai Luoyin de inmediato capturó este momento extraordinario.

La competencia estaba por comenzar.

Todos los participantes de cada grupo se alinearon en sus posiciones en el campo. El primer grupo ya se había preparado; algunos parecían nerviosos mientras que otros estaban embravecidos con confianza. 

Una vez que la pistola dio el tiro de inicio, una fila de personas se abalanzó como flechas delicadamente talladas, saliendo disparadas de un arco. Como si tuvieran alas pegadas a sus pies, cada uno de ellos voló al frente con una fuerza increíblemente poderosa. 

Una avalancha de aplausos irrumpió violentamente desde las gradas, estudiantes y maestros estaban de pie y gritando con entusiasmo.

Los ojos de Bai Luoyin estaban inmensamente enfocados, incluso hasta el punto en que cantaban con observación y juicio. No solo disfrutó de la animada escena, sino que también recordó secretamente a todos aquellos quienes intentaban tomar el campeonato de Gu Hai.

El primer grupo terminaría pronto y el segundo se estaba preparando. El público que se había tranquilizado hace un momento, se volvió otra vez animado y lleno de energía. 

De entre la horda de personas enloquecidas, alguien hizo una broma. Segundos después, hubo un estallido de sonoras y ruidosas risas, acompañadas por abucheos y silbidos. 

Bai Luoyin no logró escuchar claramente lo que era; todo lo que captó fueron tres silabas, ‘chocolate’.

You Qi miró al estudiante detrás de él y le preguntó, “¿De qué se están riendo?”

El estudiante respondió felizmente, “Nuestra maestra es demasiado parcial. Hay tantos atletas participando en la competencia, pero ella solo le dio chocolate a Gu Hai.”

En ese momento, Bai Luoyin de repente bajó la cámara que estaba elevada en su mano. 

Un chico valiente se paró y gritó, “Maestra, es injusta. ¿Por qué solo le da chocolates a Gu Hai?”

Comparado a su normalmente explosivo temperamento, Luo Xiao Yu pareció excepcionalmente gentil y suave el día de hoy. No solo no usó ese par de diminutos ojos para mirarlos fijamente, sino que ni siquiera negó nada de lo que fue dicho. Ella simplemente mantuvo una sonrisa inmensamente agradable; una sonrisa que revelaba un tinte de vergüenza; peor aún, sus sonrosadas mejillas parecían las de una jovencita de dieciocho años. Era raro ver así a Luo Xiao Yu, tan amigable y fácil de entender, muchos estudiantes quisieron tomarse una foto grupal con ella. Por una vez, el ambiente de esta clase fue envuelto con alegría y vivacidad. 

Bai Luoyin se detuvo por unos cuantos segundos, entonces levantó nuevamente la cámara en su mano. 

El tercer grupo de participantes apareció en la pista y se alineó en sus respectivos lugares. 

Solo entonces Luo Xiao Yu comenzó a reformar la situación en las gradas con su tono de voz más demandante, “Dejen de hacer tanto ruido. Tranquilícense, Gu Hai está por comenzar su carrera.”

Cuando la voz de mando que indicó ‘listos, prepárense’, informando a todos que el siguiente grupo estaba por comenzar su ronda, los participantes se agacharon.