8.

6.9K 475 78
                                    

El rumor de un nuevo niño en la empresa, a parte del pequeño Tae, a quien ya conocían, llego a todos los trabajadores, haciendo que los mas curiosos llegaran al piso donde se encontraba la sala de juegos, viendo en esta como el presidente de la compañía, su esposo y el pequeño Tae abrazaban entre sueños a un pequeño niño pálido, todos dormidos con una bella sonrisa.

Los empleados miraban de forma curiosa, pero con ternura la escena y cada vez más personas se juntaban frente a la gran ventana, murmurando lo lindos que se veían, en un momento, un grupo de tres muchachos, golpearon el vidrio, no fue tan fuerte para despertar a los mayores, pero lo suficiente para que los dos pequeños, con los ojitos entrecerrados, se sentaran, siendo el pálido quien busco con su ceñito fruncido a quien había interrumpido su sueño, encontrando a una gran cantidad de personas, que los miraban con ternura, pero cambiaron a una expresión de shock y miedo al ver como el pequeño miraba a los adultos y los ojitos se llenaban de lagrimas al sentirse intimidado.

El momento de miradas duro un poco hasta que el menor de los niños, se puso de pie tomando la mano de Yoongi, para encaminarse a la puerta, empujando lentamente para salir, aun bajo las miradas de todos, el menor avanzo con el pálido a rastras, hasta llegar junto a un joven que les miraba con una sonrisa.

--Hola Tae—saludo el mayor agachándose para quedar a la altura de los pequeños—quien es él, pequeño?

--Él es mi her-herrmano.
Todos estaban pendientes de los niños y ante la respuesta de Tae, todos quedaron asombrados, mirando al niño, quien tímido se ubico detrás de Tae.

--Hyun—llamo Tae, halando el pantalón del joven—me acompanas al bano.

El mayor asintió rápidamente, ya que, era él quien se encargaba del pequeño cuando este acompañaba a Nam al trabajo, estiro su mano esperando que el pequeño la tomara para dirigirse a los baños del tercer piso, que eran los que más le gustaban al pequeño, Yoongi por su lado, se dejo llevar, sintiendo un poco de miedo, pero riendo cuando su hermanito lo hacia y con forme los minutos pasaban, se sintió bien con el ya presentado Hoseok o Hobi, como le dijo a los niños que le dijeran.

La parada al baño fue un poco demorada, ya que los niños se divirtieron jugando con el jabón, cuando salieron, Tae insistió en ir a la cafetería, quería un dulce para él y para su hermanito.



















Cuando Nam estiro su brazo y atrapo el cuerpo de su esposo, sonrió feliz de poderlo abrazar, aun mas cuando Jin correspondió el abrazo. Las personas ya no miraban, es mas, se habían retirado del piso para darles privacidad y porque querían ver a los niños.

Jin estaba feliz, estaba calientito, los brazos de su esposo lo abrazaban, todo esta en silencio, perfecto. Demasiado perfecto. El mayor abrió los ojos de golpe, tanteando la colchoneta para ver si sus niños estaban allí, cuando no los sintió sus ojos viajaron por el lugar, viéndolo vacío. Como si le hubieran golpeado se sentó, sintiendo como el corazón empezaba a saltar en su interior, se giró y sacudió al moreno bruscamente, quien asustado, imito la posición del mayor.

--Nam….

--Jin…que paso?...

--Nam…--la voz era cada vez mas baja, mientras las manos le temblaban.—Nam….

--Amor? …… que pasa? Que tienes?—el moreno se estaba preocupando al ver a su pareja en ese estado

--Nam….los…los niños….

--Que pasa con los niños?

--No…no están….

--Jinnie…..

--Nam mis hijos no están!!!

En ese momento el moreno miro a si alrededor viendo la puerta abierta y ningún rastro de los niños, se puso de pie, tendiendo la mano a su pareja quien ya tenia lagrimas bajando por su mejilla, para luego salir casi corriendo, buscando en los estudios que estaban abiertos, en los baños, pero sin obtener pista alguna de los niños. Jin se encontraba sumamente preocupado, y Nam, intentaba mantener la calma por los dos, pero sentía un vacío en el pecho. El moreno vio el elevador y recordando que a su pequeño Tae le gustaba subirse y oprimir los botones, tomo la mano de su pareja y así empezó una larga búsqueda desde el ultimo piso y hacía abajo, sintiendo cada vez mas miedo, al recorrer cada piso sin encontrarlos.











Sweet FamilyWhere stories live. Discover now