ten days of whatsapp challenge ✧ jikook

✓ Challenge #10 (Rough)

✧ ❪ You are mine, baby ❫ ✧

[ Advertencia: dirty talk & daddy kink ]

2:26 A.M

La madrugada de un sábado había comenzado, y con ello empezaron los dolores y las incomodidades del celo del omega.

Aún dormido, iniciaron una serie de tirones en su vientre bajo, provocando que el joven castaño se removiera en su lugar. Luego pasaron a ser punzadas, un poco más fuertes, en su pelvis.

Su frente comenzaba a tener rastros de sudor, su rostro estaba sonrojándose y su respiración se agitaba cada vez más.

Hasta que una fuerte contracción en su entrada lo hizo despertarse, soltando un involuntario gemido y jadeando.

Una de sus manos descendió a su barriga, por debajo de la camisa de Park que tenía puesta, mientras que la otra se dirigía a su cabello, el cual estaba levemente mojado por la transpiración.

Sintió sus ojos cristalizados, y sus piernas por impulso se cerraron fuertemente. Volteó a ver a su Hyung, el cual aún dormido tenía el ceño fruncido y palmeaba con su mano la cama, buscando el cuerpo de Jungkook.

—Jimin-shi...—murmuró bajito, casi en un sollozo, tocando su pierna—. Despierte, Hyung, d-despier- ¡Ah~!—exclamó sorprendido al sentir que el nombrado lo tomaba de la cintura y volvía a acomodarlo entre sus brazos, como cuando dormían.

La cara de Jimin se enterró en su cuello, oliendo y olfateando desesperado el fuerte y exquisito aroma de su omega. Sus colmillos se alargaron un poco, rozando su piel y provocando un débil y sensible gemido al menor.

—Hyung—susurró, acariciando su pecho—. P-Por favor, mgh~—dejó caer un par de lágrimas.

De verdad, necesitaba ser follado por el rubio ya mismo. Su entrada se contraía por aquella necesidad.

Por lo que no aguantó más. Se soltó del fuerte agarre de su mayor, y se sentó a horcajadas en su regazo. Sus manos se apoyaron en el vientre bajo ajeno.

—Jimin, J-Jimin—lo llamaba, nervioso—. Vamos, Hyung. Despierte—empezó a frotar su cubierto y húmedo trasero sobre la ya dura erección del nombrado.

—Mmm... ¿Bebé?—dudó, con su voz mucho más ronca de lo normal, lo cual hizo que una gran cantidad de lubricante se expulsara por la entrada contraria—¡Oh, mierda! —exclamó al notar en la situación que estaban.

—Hyung, por f-favor—siguió frotándose—. M-Mi celo... Ngh—gimió entrecortado.

Jimin sonrió travieso, su cabello estando algo despeinado y su cuerpo semi-desnudo, dejando a la vista del pequeño su six pack, junto con sus fuertes brazos y ejercitados pectorales.