Adrien Agreste y Marinette Dupain-Cheng son dos adolescentes con una vida más o menos normal.
Pero hay algo de ellos que nadie sabía. Son Ladybug y Chat Noir... los héroes de París.
La situación en la que se encontraban parecía que no iba a dejarlos...
¡Lo hicimos! ¡Al fin Marinette y yo hemos dado ese paso tan importante!
Pero antes de empezar, he de decir que incluso nuestros amigos no se esperaban que aún no lo hubiésemos hecho. Incluso, Alya pensaba que sí nos habíamos aventurado a hacerlo ya, y por su culpa habían surgido situaciones algo incómodas...
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La realidad fue muy distinta, ya que...
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Pero antes, creo que debo contarlo todo desde el principio...
Todo vino gracias a nuestro acto de graduación. En él, primero íbamos a hacer un pequeño acto de despedida, para después seguir con una cena y un baile. Sin duda, se trataba de algo muy especial que no me quería perder por nada del mundo. Por suerte, no me costó mucho convencer a mi padre para ir, con la condición de que después volvería a casa con mi guardaespaldas.
Por ello, el día de antes me puse a pensar el conjunto que llevaría. Sabía que era como un último adiós a la escuela, y por eso quería causar una gran impresión. Finalmente, me terminé decidiendo por ponerme el traje que mi padre había hecho expresamente para mí, junto con el bombín que Marinette me preparó hace unos años.
