My Hero Academia One-shots [homo/hetero]

TodoMomo [1]

Yaoyorozu disfrutaba el escaso tiempo libre en sus vacaciones yendo a una cafetería a leer sobre la composición de la materia. No dejaba de estudiar ni cuando descansaba pero, se sentía en paz teniendo un libro entre las manos.

Todavía no había pedido nada, estaba esperando a que el barista estrella, a los ojos de ella, llegara a tomar su turno.

Todoroki empezó a trabajar en las vacaciones porque no quería pasar más tiempo del necesario en casa. No porque realmente lo necesitara.

Él llegó unos minutos después, Yaoyorazu esperó a que se ponga el delantal y que algunas personas vayan a hacer sus pedidos para que no parezca que estuviera esperando solo por él; se acomodó el cabello en el reflejo de la ventana y caminó hacia el mostrador.

—Todoroki— Saludó, sonriente.

—Yaoyorozu— Sonrió también— ¿Lo de siempre?

—Lo de siempre.

«¡Sientate en los banquillos del mostrador! ¡No seas cobarde!» Los consejos de Mina le vinieron a la cabeza como si ella fuera la voz de su conciencia. Se lo había contado cuando se juntaron unos días antes. Le dijo que quizás sentía algo por él; más allá de amistad, no sabría decir si tanto como amor, pero efectivamente lo suficiente como para que se encuentre día por medio en un café esperando por Shoto Todoroki.

Lo descubrió por accidente cuando quiso comprar un café para llevar y lo encontró atendiendo. Sus turnos justo coincidían con los momentos de ocio de Yaoyorazu así que, iba a aprovechar la casualidad.

Obedeció a Mina y se sentó en los banquillos.

—Matcha green tea late— Le dio el pedido. Se permitió observarlo un poco; camisa blanca, pantalón negro y delantal sobre la cintura verde manzana. Le quedaba bonito. No había muchas cosas que le quedaran poco atractivo en su opinión— ¿Pasa algo?

—No— Parpadeó un par de veces y abrió el libro— gracias.

Todoroki sonrió extrañado y se fue a recibir otros pedidos.

¿Cómo podría iniciar una conversación normal? Se sentía como una niña pequeña.

Leía la misma oración una y otra vez, sin poder concentrarse.

—¿Qué lees?— Preguntó Todoroki volviendo a su lugar.

Yaoyorazu se sobresaltó.

—Eh...ah...un libro sobre composición de la materia.

—Pero tú ya sabes todo sobre eso.

—Sí, bueno— Sonrió— Lo estoy releyendo para reforzar términos.

Todoroki preparaba un smoothie mientras la escuchaban, asintió y se alejó para entregar la orden. Volvió a los segundos. La vida de un trabajador en muy ajetreada, pensó Yaoyorazu.

—Estas estudiando todo el tiempo, eres increíble, Momo— Su corazón empezó a latir con rapidez. Me llamó por mi nombre, no mi apellido, ni mi apodo. Mi nombre. El adjetivo que usó también contribuía a su emoción— ¿Te molesta que te llame Momo?

—No— Negó algo exagerado— No, en lo absoluto.

Todoroki sonrió.

—Entonces dime Shōto.

Momo apretó los labios tímidamente y miró a la taza. ¿En qué momento había terminado el té? No importaba, seguía con hambre. Necesitaba acompañarlo con algo.

—Shōto...

—Momo.

Momo se sonrojó.

—Te traeré otro— Tomó su taza sin preguntar.