🍷🍷🍷🍷

252 32 0
                                    

JungWoo y Doyoung se encontraban sumergiéndose en una profunda conversación. Incluso el volumen de la música no era un problema, ni siquiera las personas pasando de aquí allá. Eran solo ellos en esos dos banquillos de la barra.

La noche comenzaba a avanzar y empezaba a sonar música más bailable.
El alcohol ya había viajado hacia cada pulgada de los cuerpos de los caballeros, no para volverlos inconscientes ni mucho menos inapropiados, pero si algo más cálidos y relajados.

...

-Uff, ya está haciendo algo de calor___Doyoung jala hacia abajo el cuello de su corbata dejando al descubierto gran parte de su clavícula a lo que JungWoo echa un vistazo involuntario para luego apartar su mirada indiscretamente.

Doyoung sabía lo que hacía, aunque indiscutiblemente ya el clima se estaba tornando algo más cálido por el bailar de las personas y los tragos que se venían tomando durante la noche.

-Sí, este whisky está algo fuerte___JungWoo levanta su copa analizando su contenido de una manera muy ingenua.

-Pero si lleva tomando el mismo trago hace más de 10 minutos y aún le queda un buen sorbo.

-Es un record, el anterior duró casi una hora___ambos ríen a la broma tan elocuente.

▫️▪️▫️▪️

-La música se escucha tan bien. ¿Quiere bailar JungWoo?

- ¿Eh?___JungWoo reacciona sorprendido ante la propuesta abriendo sus ojos como plato. Se torna intranquilo con mucha notoriedad.

-Wow wow. Ya sabe. Uno en frente del otro. Como dos amigotes. Nada raro___carcajea nerviosamente___Somos dos conocidos pasando el rato. Solo eso___Doyoung se sintió algo agobiado por la reacción tan explosiva de JungWoo e inmediatamente quiso calmar su sorpresa.

-No... no veo por qué no___JungWoo estaba algo desilusionado ante esa aclaración.

(...)

Quizás Doyoung había malinterpretado su manera de reaccionar de manera que quiso poner las cartas sobre la mesa. No era que le molestara que lo invitase a bailar, y menos si se involucraban de la manera contraria a la que el otro explicaba. Solo que se hallaba cada vez más sorprendido por cada jugada que ejecutaba el pelinegro. Para colmo su rostro era un lienzo en blanco en el que sus emociones se estrellaban a puro e intenso color, no pudiendo esconder ninguno de sus sentimientos. A veces deseaba ser más frio y calculador como Doyoung. O al menos eso pensaba él.

(...)

-Aunque he de confesarte que no soy muy buen bailarín___JungWoo hace el ridículo de sí mismo para 'salvar la situación'

- ¿Pues sabe usted qué? ___Doyoung se aproxima al oído de JungWoo___Yo tampoco___susurra el pelinegro poniéndole a JungWoo la piel de gallina bajo toda su vestimenta.

-Vamos___Doyoung le hace un ademán a JungWoo en vísperas que lo siguiera a la pista de baile.

...

Se adentraron al tumulto de personas y buscaron un lugar entre tantos que bailaban. Nada extravagante ni vulgar, solo un baile. Tal y como JungWoo había dicho, la noche aún era joven.

...

Se encontraban justamente uno delante del otro, sosteniendo sus copas mientras se balanceaban de un lado a otro no intercambiando ni una sola mirada entre ambos.

A medida que la música continuaba era inevitable para Doyoung empezar a sentirla bien adentro en sus entrañas.

Sus habilidades musicales en parte le propiciaban poder dejar fluir su cuerpo al ritmo en un vaivén naturalmente sensual que por supuesto no pasaban por desapercibido ante los ojos de JungWoo. Ver esas caderas batiéndose cada vez con más soltura lo tenían echando un vistazo o dos hacia la parte baja de Doyoung de vez en cuando. Y al decir verdad JungWoo mentía descaradamente al decir que no era buen bailarín, puesto que era todo lo contrario.

Él al igual que Doyoung siempre tuvo inclinación hacia las artes, no solo poseía una voz naturalmente angelical haciendo que pareciera cantar con solo hablar, sino que era dueño de unos pasos de baile envidiables y apasionados. He de ahí el 'bullying' de sus amigos hacia su hábito de usar chándales; siendo esta la prenda de vestir que haya más cómoda al pasar horas y horas ensayando en esa supuestamente clausurada 'habitación de huéspedes' en su casa, a la que nadie nunca ha accedido.

Ni siquiera sus mejores amigos conocen de su verdadero propósito, y menos saben de los dotes de JungWoo dado que es algo que siempre mantuvo para sí mismo. Lo usaba como una especie de herramienta para aliviar todo ese estrés que ya experimentaba desde temprana edad y más ahora en su reciente y primera rotura emocional que lo llevaran a un diagnóstico catastrófico.

...

JungWoo miraba de reojo a Doyoung que barría su cabello hacia atrás con su mano libre, bailando desvergonzadamente mientras gotas de sudor corrían por su cuello.

Era una escena algo erótica y más para los inocentes ojos de JungWoo quien se empezaba a sentir algo ridiculizando ante no poder bailar cómodamente, pensando en lo que pensarían todos a su alrededor y peor: ¿qué pensaría Doyoung?

Fallaba una y otra vez en coordinar sus pasos. No estaba frente a su espejo gigante de la 'habitación de huéspedes'. No era solamente Kai quien estaba observándolo. Se sentía frustrado.

Doyoung se toma un momento para salir de su éxtasis danzaria para mirar a JungWoo y notar esa mirada con la que ya estaba algo familiar a pesar de solo haberlo conocido hace unas horas. Sutilmente se mueve a su lado sin dejar de bailar e intenta seguir algún paso con el que el pelirrubio saliera para hacerlo sentir más cómodo, pero eso no parecía funcionar.

Doyoung incluso le hacía señas de cómo podía mover sus pies, pero tener al pelinegro a su pendiente y quizás no disfrutando de la música tenía a JungWoo más desconcertado aún.

Entonces es cuando lo toma de sus caderas aun estando a su lado para guiarlas con suavidad, balanceándolas de un lado a otro. De esa manera los pies de JungWoo también iban en contraste con su parte media del cuerpo. Todo esto con las varoniles manos de Doyoung sobre sus ancas.

El rubio transpiraba, pero a toda costa se sumía a la guía que le propiciaba su contrario . Después de todo no quería decepcionarlo o quedar en ridículo.

El pelinegro se hallaba feliz de que su proceder estuviera ayudando a su conocido. Le sonreía con amplitud haciéndole señas que indicaban que lo hacía bien. JungWoo también sonreía, pero bajo toda esa fachada su cabeza bombeaba, sus dientes rechinaban y su pulso se aceleraba a cada momento. Eran los síntomas:

Le costaba respirar, pero siempre se las arregló para esconder que estaba a punto de tener un ataque de pánico. Toda su vida lo hizo.

Es la razón por la que nunca nadie supo; ni sus maestros, amigos, mucho menos sus padres. Solo él sufría dentro de ese cuerpo e inconscientemente maquillaba sus verdaderas emociones cada vez, detonando así una granada que explotaría en cualquier momento. Y de esa manera sucedió, aunque en menor potencia (por el momento) : hace cuestión de un año y medio.

No pudiendo aguantar más desaparece de la escena en un inesperado soplido,,,

𝐖𝐞 𝐃𝐨𝐧'𝐭 𝐂𝐚𝐫𝐞_𝐃𝐨𝐖𝐨𝐨Where stories live. Discover now