Capitulo 37

663 77 6
                                    



Habían llegado ya al hotel, y Mingi estaba aferrado a Hongjoong como un pequeño koala, durmió las casi dos horas de vuelo y al aterrizar hizo que Hongjoong lo cargara lo cual complació d cierta manera al azabache.

—¿Te sientes bien bebé?— Hongjoong sentía que algo no iba bien con su esposo desde que tomaron el avión, pero por más que este preguntase, Mingi negaba que le hubiera pasado algo, tanto era su seguridad que Hongjoong comenzaba a creerle.

—H-hyung— le llamó.
—Tu me quieres, ¿verdad?— y es que Hongjoong no supo cuando Mingi había comenzado a gimotear lloroso.

Suavemente le besó y con un mirada cargada de ternura le dijo.

—Te amo ya debes saberlo de sobra mi amor— le besó otra vez y Mingi se limpió las lágrimas.

Al pasar un rato dándose mimos (más bien Hongjoong dándoselos a Mingi) el menor comenzó a restregarse en el pecho del contrario y a besarle el rostro buscando tener el mayor contacto con él.

Y es que Mingi quería sentir a Hongjoong, sin necesidad de lo sexual, solo él, Hongjoong y su pequeño bebé.

—Gatito mimado— le cargó y el menor protesto.

—Durmamos abrazados Hongieee~— el mencionado miró fijamente aquellos ojos hermosos que su bebé poseía.
—Besame— el mayor comenzó a besarle en los labios lento y le recostó en la cama acariciando sus mejillas al separarse de aquellos labios que tanto amaba y se acoplaban tanto a los propios, tenían varías cosas pensadas para hacer el primer día en Japón, pero ciertamente era impredecible lo que sucedería, y más con Mingi siendo tan mimoso como ahora.

—¿Nos quedamos aquí abrazaditos?— le pregunto susurrante, el pálido asintió jugueteando con los botones de la camisa de Hongjoong, mientras este ya había colado sus cálidas manos por debajo de su camisa para acariciar la pancita de su esposo.

Mingi sonrió al sentir los suaves masajes que Hongjoong daba a su bebé que aún descansaba en su pancita.

—Hongie— le miró, el mayor hizo un sonido con la garganta en señal de que le escuchaba.
—¿Te gustaría que fuera bebé niña o bebé niño?— cuestionó dibujando trazos imaginarios en el pecho de su esposo.

Hongjoong quién se sentía tan relajado, sonrió con pereza y besándole la nariz subió una mano a la mejilla del menor haciendo que este le viese.

—Me gustaría que fuera igual a tí, no importa si es niño o niña— le acarició.
—Lo amaré sea lo que sea, ¿de acuerdo?— Mingi y Hongjoong se miraron por varios minutos o quizás horas, se perdieron en los ojos del contrario acariciándose inocentemente acostados en aquella cómoda cama, hasta que Mingi arrugó la cara en señal de dolor, y Hongjoong se alarmó por ello.

Entonces Mingi entró en pánico, sintió un dolor en su pancita, rápidamente se preocupó hasta el punto de mirar a Hongjoong con los ojos llorosos, comenzó a respirar con intensidad y luego volvió a sentir otra punzada y ahí fue cuando sollozo con terror, Hongjoong se puso pálido y rápidamente llamó a recepción por ayuda, para seguidamente abrazar y consolar a su bebé que lloroso y asustado no podía pronunciar palabra alguna mientras en mismo no entendía que pasaba y la preocupación se lo carcomía.

Gracias por leer ♥️

Dulce bebé ( Hongmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora