~ENCONTARTE~

Decoraciones y revelación

*Narrando Jay*

Se lo dijimos a Eva y ella fue la más felíz. Teníamos un dormitorio libre y fuimos a comprar cosas. Eva nos prohibió rotundamente comprar una cuna, debido a que sus padres tenían la que hace muuuuucho tiempo fué suya y de Lloyd.

Ella tenía las llaves de la casa de sus padres, y ella sabía cuando no estaban en su casa. Bajamos al sótano (No, ni modo de SUBIR al sótano) y cogimos la cuna con otras cosas. Volvimos a nuestra casa.

El cuarto estaba vacío, por lo que no fué un gran trabajo colocar las cosas.

Pusimos la cuna en un lateral, colgamos un móvil sobre ella y dejamos un espacio libre para poner un cabecero y su nombre sobre ella.

En frente de la cuna pusimos un armario. Cole y yo pintamos los pasadores de azul y negro. Encima colocamos un osito de peluche y un interfono (O como se diga. Es lo que se usa para saber si el niño/a está bien o mal).

Luego pusimos una cómoda y un baúl, encima de la cómoda pusimos un cambiador que compramos, este era negro con estrellitas azules. Pintamos los pasadores de azul y negro. El baúl era blanco con asas negras y azules.

Todos los muebles eran blancos.

Jay: Ha quedado muy bonita.

Cole: Cierto.

Eva: Sí.

En el primer entrenamiento que tuvimos después de enterarnos de que íbamos a ser padres, les dijimos a todos la noticia.

*4 meses después*

*Narrando Eva*

Cole y Jay me despertaron para ir a ver si tendrían un hijo o una hija, casi les grito por despertarme un domingo a las 09:30, pero me contuve. Fuimos a desayunar y luego nos fuimos al hospital.

*En el hospital*

Doctor: Jay Walker, pase.

Yo no quería entrar pero me obligaron.

*En la consulta*

Doctor: ¿Esta es vuestra hija mayor?

Eva: No.

Cole: Somos amigos desde hace muuuuucho.

Doctor: Vale. Primero os preguntaré: ¿Qué queréis que sea?

Jay y Eva: A mi me da igual.

Cole: Preferiría que sea una niña.

Jay miró sorprendido a Cole. Tenía cara de "Really?!? Es c0ña, ¿no?".

El doctor hizo lo que tenía que hacer y nos dijo que tendrían:

Doctor: Vais a ser padres de... ¡Una niña!

En ese momento, Cole y Jay comenzaron a llorar de felicidad.

Volvimos a casa y Jay y Cole se lo dijeron al resto del equipo y todos estaban realmente felices.