Al Fuego.

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Lance caminaba por los pasillos al hangar de Blue, tal y como quedó con Keith.

Logro en dos horas y media que Pidge y Hunk se cansaran y se durmieran por jugar distintos videojuegos, usualmente nunca se cansaban de ellos, pero esta noche preparo un juego que requería mucho movimiento en el cuerpo, Pidge y Hunk no solían mover mucho el cuerpo y es por eso que se cansaron tan rápido. La media hora la uso para cambiarse a su única ropa y salir de allí.

Cuando finalmente llego al hangar miro al león azul, pierna derecha de Voltron... Y solo eso...

Suspiró, no es que se quejara, pero le hubiera gustado ser algo más que una pierna. En Garrison era el chico alegría, el chico enamorado o el chico bromas, todos le recordaban como algo, pero en Voltron, una súper arma del universo, es una miserable pierna.

Escucho la puerta del hangar deslizarse y se volteó encontrando a Keith, estaba sin su chaqueta roja de siempre, cuando lo vio le sonrió y se acerco.

— Perdona la tardanza —. Le dijo Keith cuando estuvo a su lado.

— No te preocupes amigo, es normal a estas horas, en las que debes de estar durmiendo —. Le contesto.

Keith solo desvío y se cruzó de brazos, se quedaron en un silenció incómodo.

— ¿Y para que me necesitabas? —. Le preguntó Keith con la mirada en el león.

— Bueno... —. Murmuro rascándose la nuca, no sabía si esto estaría bien o no —, quería que habláramos de la discusión de hoy...

El azabache desvío la mirada del león a él, parecía sorprendido. Sinceramente no esperaba que tan solo con la mirada de Keith encima de él lo ponía nervioso, y no sabía porque. Keith empezó a abrazarse a si mismo mientras bajaba la cabeza.

— Lance...yo... —. Empezó Keith frotando sus manos en sus brazos —, yo no... quiero hablar de... —. Cerro los ojos e hizo una pausa — ...de eso... —. Abrió sus ojos amatistas —, no aún...

— Pero... —. Dijo Lance —, yo te quiero ayudar....

— Pero yo ya tengo ayuda de Pidge y Hunk —. Dijo Keith mirándolo confundido —, no es necesario Lance.

Lance desvío la mirada y volvió sus manos en puños, claro, nadie lo necesitaba, solo a los más inteligentes, a sus amigos. Creía que ayudar a Keith sería algo con lo que podría sentirse especial.

— Pero yo quiero hacerlo —. Murmuró Lance frunciendo el ceño.

Keith lo miró con una ceja alzada mientras que ladeaba la cabeza con sus brazos aún cruzados, no entendía nada ¿porqué Lance repentinamente quería ayudarlo? No entendía nada.

— Pero... ¿porqué? —. Murmuro Keith.

— Porque tu lo hiciste conmigo Keith, yo... te conté todos mis pensamientos respecto a... el equipo —. Era difícil hablar con un nudo en la garganta —, y si al menos no me vas a contar de lo que sea que te pasa... —. Lo miro a los ojos y se mantuvo firme — por lo menos puedo ayudarte.

Keith se sorprendió, no se esperaba eso sinceramente, pero era mejor esto que a lo que pensaba antes. Inconscientemente sonrió y su sangre subió a su cara, desvío la mirada rápidamente posando una mano en su boca para ocultar su sonrojo y hablo.

— Supongo que estaría bien... —. Intento con todas sus fuerzas ocultar la boba sonrisa que tenía, pero se le hacía imposible —, ¿y como quieres ayudarme...?

Lance se quedo callado a eso, no había pensado en eso, tenía planeado hablar con Keith sobre su problema y aconsejarlo.... Keith lo miro confundido.

Por ti lo que sea [Klance]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora