Capítulo #34

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Narra Christian:

Creo que Dios se apiado de mí... las personas con las cual me reuniría atrasaron la reunión dos horas.

Como trabaje toda la tarde y noche de ayer, y a punta de café amanecí trabajando terminé todo... la computadora la mandé a mantenimiento y en la tarde me dirán si se puede recuperar algo del disco duro.

Mande a pedir un traje en el sexto piso para la reunión y le pedí un poco de maquillaje a Yaya para las ojeras y la marca roja de la cachetada que mi bebé me dió ayer... llegó la hora de la reunió y me presenté.

-Buenos días señor Emerson ¿como está?–Salude al entrar a la sala de reuniones.

-Buenos días Chris, estoy bien gracias por preguntar, y ¿tu como éstas?–Pregunto con una sonrisa.

-Bien.. bueno esto es lo que tengo para usted, espero y sea de su agrado–Le entregue un portafolio con los diseños que prepare ayer y el los miraba detenidamente.

Mis nervios me estaban consumiendo, este contrato era maravilloso por que este dinero era justo lo que necesitaba para cubrir unos gastos por el desfile.

-Pues que te puedo decir Chris–Hablo el sin ninguna expresión.

-Si no le gustó los diseños me lo puede decir de una... y si me da más tie...

-¡Me encantan!–Hablo el con una gran sonrisa.

-¿Enserio?–Le pregunto dudoso.

-¡Por supuesto Chris, estos diseños son hermosos.. sabía que tu eres el único que podía ayudarme, eres el único diseñador que conosco hace tanto y aún sigue con su talento intacto!–Se dirigió Emerson hacia mi y me abrazo.

-No agradezca, sabes que te debo mucho, tu me ayudaste con mi sueño es lo menos que puedo hacer por ti...

-Te pagaré por todo, lo prometo–Hablo él ya desde su asiento.

-Mientras cumplas lo pactado todo estara bien.. te daré tiempo y escojeras los que quieras sobre la cantidad estipulada en el contrato.. una vez listo firmaremos y cerraremos el negocio–El asíntio y salí de la sala de juntas, junto con Yaya.

Los dos llegamos a mi oficina y celebramos... Emerson fue al primer hombre que le empecé vendiendo mis diseños, trabaje para él varios años y fueron años maravillosos.. a mis quince años me fui a París a hacer un curso de diseño y cuando regrese, llegué con la idea de mi propia empresa y él me ayudó. Su empresa está pasando un mal momento ahora y no puedo pensar en competencia, pienso que él fue el único que creyó en un niño de seis años que sólo necesitaba una hoja, un lápiz y a su madre para diseñar. Así que si él necesita mi ayuda lo haré... una empresa de ese calibre no se puede desaparecer, además también hay muchas personas que dependen de esa empresa haci que hay que regular su contabilidad.

Nos avisaron que ya estaban listos y me dirigí a la sala otra vez, con mucha fuerza por que sentía que me derrumbaba.

Entramos el me mostró los diseños seleccionados y se sacaron aparte... firmamos el contrato y  el 60% del dinero fue depositado en una de mis cuentas de banco. El otro 40% será depositar cuando el ya esté un poco mejor con su empresa.

Ese día fue mucho trabajo... y aunque sentía que una parte de mi estaba muerta, debía seguir... seguir... seguir por que era la única forma de evitar que fuera he hiciera una locura....

Viviendo Con Mi Suegra (Yaoi/Bl) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora