ADICCIÓN. «Calum Hood» TERMINADA.

Capitulo 22:

Capítulo 22:

Alcé las cejas y sin responderle, bajé del coche pegando un portazo al bajar. Subí las escaleras que había en la entrada de la comisaría , de dos en dos enfadada. Nada más entrar por la puerta del edificio, vi a Michael y a Leire. Me paré en seco observando la escena tan tierna que protagonizaban. Ella estaba sentada en sus piernas , riéndose escandalosamente y él la miraba, como si sería la única cosa en el mundo. Michael la miró a los ojos y la dio un corto beso en los labios. Los envidiaba, envidiaba no tener con quien compartir las tardes de todos los días del año, alguien con quien pudiera sentirme bien, y tener confianza. Alguien por el que yo muriera, y él por mí. Tengo a mis amigas, pero no es lo mismo.

Noté el cuerpo de Luke chocarse con el mío cuando los dos enamorados, terminaron su beso.

-Ahí están.-señaló a Michael y a Leire.

Saludé con timidez a Leire, era la primera vez que la veía. Ella me sonrió ampliamente.

-¿No han llegado los demás?-preguntó Luke mirando a los lados.

-Que va.-contestó Michael.- Al parecer Calum fue a recoger a Verónica.

-¿Y Ash?-esta vez pregunté yo.

-Ashton está recogiendo a Belén, me acaba de llamar y me ha dicho que ahora viene.-contestó Leire levantándose de las piernas de Mikey.

-¡Que puto asco!-la voz de Verónica apareció de la nada. Todos nos giramos hacia la puerta, y allí estaban Calum, América y Verónica, que estaba voceando.Nos vió y se puso entre Luke y Michael.-¡Estaban follando!

-¡No estábamos follando!-dijo América indignada.

-¡Joder , que no! Estaba saliendo de casa, y te veo a ti encima de Calum en el coche, besándole.-siguió gritando Verónica.

-Eso no quiere decir nada.-dijo Mer.

-Que te he visto subirte los pantalones.-la dijo. América se puso roja como un tomate de vergüenza y Calum la abrazó por detrás y la dio un beso en la nuca.

Otros a los que envidiaba.

No entendía porque no podía tener a nadie, como ellos.

-¿Y Belén?-preguntó Calum intentado desviarse del tema.

-Aquí.-una voz a nuestras espaldas sonó. Todos nos giramos. Era Belén, sana y salva.

***

América:

Dejamos a Belén en casa, junto a Ashton y Calum condujo hasta su casa.

Eran las doce del mediodía, pero no podía estar de pie ni un segundo más. Me dolían los pies, la cabeza, la garganta, la espalda y seguramente, la regla estaría a punto de bajarme. Además de que por la noche no había dormido nada.

Nada más llegar a casa de Calum me desvestí y me metí en la cama. Creía que me moría de cansancio.

Noté como la cama era presionada por el cuerpo de Calum mientras se metía en la cama junto a mí.

-¿Tan cansada estás?-me preguntó. Abrí un ojo y le vi mirándome  con sus ojos marrones chocolate. Asentí, no tenía fuerzas para hablar.-Antes no estabas tan cansada.-arqueó las cejas dándome a entender a qué situación se refería. Antes de que Verónica bajara de casa, Calum y yo estábamos a punto de hacerlo, pero llegó ella y puso el grito en el cielo.

-¿No te estarás poniendo enferma?

-Me duele bastante la garganta, y tengo la espalda hecha una mierda.-dije dos de las pocas cosas que me pasaban en ese momento.