Touch. Jaime/Nico Goth jaidefinichon

Secrets i have held in my heart (are harder to hide than i thought...)

— ¿Bestia weon estai bien?

Preguntó el Yelo, dirigiendo la atención de todos al susodicho, que se agarraba la cabeza con las manos. 

—Noo weon, se me mueve too, quiero puro ir a acostarme, les estoy diciendo hace rato, pero no me pueo parar... —Tenia una autentica cara de dolor.

—Ya weon, vamo a acostarnos, yo igual estoy cagao e sueño. —Dijo el Pechos, parandose del sofa por primera vez en horas. —¿Edgar me ayudai a llevarlo a su pieza?

—Si, vamo. —El Edgar se paró también del otro sofa, y el Yelo que estaba apoyandose en él, calló de lleno a este.

—Auch.

Mientras el Edgar y el Pechos llevaban al Bestia a su pieza, y el Yelo se quedaba raja en el sofa, el Nico seguia sentando encima del Jaime, o en relidad, el Jaime habia abierto las piernas hasta hacer espacio suficiente como para que el Nico cupiera alli. Lo abrazaba por la espalda, su cara en su hombro, respirandolo, quemando con su aliento por sobre la polera. El Nico acomodó su espalda en su pecho, cerrando los ojos, pasando los dedos por las manos que se cerraban sobre su torso. Inclinó la cabeza hacia atras y la apoyo en el hombro del otro, se quedo un momento así, disfrutando la cercania. Odiandose un poco por extrañar a ese cochesumare incluso cuando lo tenia tan cerca. Suspiró antes de levantarse, caminando hasta la escalera también.

—¿Vamo a acostarno?

El Jaime luce un poco desconcertado.

—¿A donde?

—A la pieza del hermano del Bestia po.

—Soy patuo weon.

—Ah si siempre nos quedamo ahí.

El Jaime avanza, moviendo los pies con torpeza, caminando con cuidado. Algo inseguro, lo cual es extraño. Estira su mano mientras se tambalea, —esta más borracho de lo que cree—, hasta que toma la suya con los dedos tremulos, la piel fria. Sus dedos son mas largos que los suyos, suaves, hacen que su piel se vuelva efervescente. El Nico siente como su corazón da un salto mortal triple dentro de su caja torácica. Boom-Boom-Boom.

—Sueltame. —Se queja, tirando de su mano. Esta tan nervioso que tiembla un poco.

—¿Por qué?

—Nos van a ver... —susurra pero el Jaime sigue jalandolo escaleras arriba.

—Ah le dai color.

—Y despues yo soy el fleto wn...

Casi chocan con el Edgar al llegar arriba.

—¿y el Pechos?

—Se quedo cuidando al Bestia, el weon acaba de vomitar.

—¿Y donde vai a dormir wn?

—En el sillon po, igual que siempre. —Parece no darse cuenta de que van tomados de la mano.

—Wenas nochens~

Y desaparece escaleras abajo.

...

El Nico llega y se tira a la cama pesadamente, hundiendo la cara en la almohada, murmurando cosas que el Jaime no entiende. Lo voltea y le quita los zapatos y los jeans, le deja el poleron. No puede contar las veces que ha hecho esto, o las que el Nico lo ha hecho por él, despues de un carrete. El Nico se mete bajo las tapas rapidamente, reclamando. Hace frio.

—Jaimeee estoy borracho.

—Ya sé Nico.

—Y yo estoy aqui...! Borracho y loocoo!!

—Shhhhh no empecí a cantar de nuevo por la mierda.

—¡Y mi coraZÓN IDIOTA!!!!

—Callate conchetumaaare. —Reclama mientras se acuesta con él, bajo las mantas. Hace frio, la ropa es incomoda contra las sabanas.

—Callame po.

No puede evitarlo, es una invitación descarada. El Jaime se siente estupido, porque no se demora ni dos segundos en estarlo besando. Le gusta su piel, y la forma en que enreda los dedos en su pelo y tira de él mas cerca. Le gusta que su lengua sea aspera y caliente y sus dedos dejen marcas en su piel, le gusta que se sienta duro y fuerte bajo sus manos, algo asi como a ti no puedo romperte. (El Jaime siempresiempre rompe todo.) Le gusta como dice su nombre ahogado contra sus labios y el sonido que hace cuando le muerde justo bajo la oreja. Un sonido suave y humedo que hace que su corazón se acelere dos latidos. Se separa para mirarle.

—...¿Nico?

—Hmm?

Solo le ve los ojos, en la oscuridad. La luz amarilla de los postes se filtra por las ventanas.

—¿De verdad volveriai con la Paula?

—Hnn—el Nico se rie entre dientes. Se nota que esta borracho. El Jaime quiere besarle un poco más, morderlo, guardarlo en alguna parte donde nadie pueda quitarselo nunca nunca. — Ques weon mi amigo...

El Nico le vuelve a besar, esta vez mas largo, acariciando su lengua lentamente con la suya. El Jaime tira de el hasta que lo tiene encima, sus piernas a cada lado de sus caderas, le esta doliendo de nuevo, ¿Que mierda es esto?

—¿Nico weon estay despiert... —Se separan tan rapidamente que les marea, miran hacia la puerta habierta. Es el Edgar, esta palido, parpadeando rapido, sosteniendose del pomo de la puerta. No hay forma de que no los hubiera visto, el Nico estaba casi totalmente sobre el Jaime, la luz del pasillo iluminaba la pieza.

Hasta que el Edgar reacciona de repente, lo procesa, y esta subitamente rojo, luce como si quisiera que la tierra se abriera en ese mismo instante y se lo tragara. —Yo... t-te venia a a a pedir m-mi celu, pporque te lo... te lo pase para... para algo y-yo —hace un sonido como que se ahoga, frustrado—  ¿Lo teni tú o no weon?

—Si... s-si weon esta ahí.—Señala el pantalon en el piso, lo cual hace que el Edgar casi se ponga morado. Avanza rapidamente hacia el —...en el bolsillo de atras. —El Edgar lo saca con torpeza y suelta los jeans como si quemaran, sale de la habitación rapidamente, sin mirarlos, diciendo buenas noches con la lengua trabada y los pies dando pasos descoordinados sobre la alfombra. Cuando cierra la puerta, el Nico no puede ni respirar.

—....Se dio cuenta ¿cierto? —Pregunta el Jaime, su voz hueca, la mirada perdida.

—Si...—Susurra el Nico. No sabe qué pensar.

—Conchesumare...

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continuara.

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nota#1. uy, tenia que hacerlo. Bue se me calman con lo del lemmon, que ya viene 7u7

nota#2. faltas de ortografia as always, bc lo escribo desde el celular. cuando me meta al pc lo arreglo todo, lo juro u.u

nota#3. Gracias por ser tan lindos, los quiero maracas <3