An ache in your soul...(is everybody's goal)

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Baja la escalera lentamente, pisando con cuidado, en silencio. Su mamá está durmiendo, el Sushi lo mira desde arriba del mueble de la tele, sus ojos brillan en la oscuridad y los gatos siempre tienen esa mirada. Te juzgan con cautela, con sabiduria milenaria.

No weí Sushi.

Llega a la puerta y se toma un segundo para respirar y que dejen de temblarle las piernas. Para de ser tan maricón por la chucha.

Pero es que el Jaime esta afuera. Esta a solo unos metros y el Nico no sabe que esperar.

Le abre la puerta y ahí está, parado bajo la lluvia, sin paraguas, empapandose sin que paresca que le importa realmente. No le mira a los ojos.

—Conchetumadre Jaime culiao te vai a enfermar más de lo que ya estai' weon entra! — Se le olvida lo nervioso que está por unos segundos, le toma de la muñeca y lo arrastra escaleras arriba—Como sali sin paraguas saco e' cacha por la chucha, se esta inundando too' Santiago.

— No estaba lloviendo cuando sali...

—Pero weon si estai viendo las nubes negras...

Llegan a su pieza, se cierra la puerta y el Nico avanza para ir a buscarle una toalla, o algo. Tendria que pasarle más ropa, el culiao esta mojao entero— pero el Jaime se acerca antes de que tenga tiempo de hacer nada. Lo ve posar sus manos en su pecho y el Nico se queda inmovil, conteniendo el aliento. El Jaime sigue sin mirarlo pero se inclina hasta que apoya la cabeza en su hombro, y su respiracion le hace cosquillas en el cuello, con el cuerpo cerquisimo pero sin tocarse del todo. Hasta que el Nico reacciona y pasa sus brazos por la espalda del Jaime, y aprieta fuerte y ahora si que se tocan. Se está mojando pero no le importa.

—¿Jaime? ¿Estai' bien? —gira la cabeza hasta que sus labios rozan la cien de el nombrado. — ¿Que haci' aqui a esta hora wn? ¿Que pasa?— contra el cabello humedo, la piel fria.

—Nada.—Siempre es la misma respuesta. Siempre pasa nada. Y entonces... ah, si. Ahí está. El Jaime gira su cabeza tambien, busca sus labios, y los encuentra. Es un beso con los labios frios, la lengua caliente. con sabor a lluvia y a te eche de menos más que la conchetumare. Con sabor a a pesar de todo, bastardo culiao, no puedo estar sin ti. Todo esta mal sin ti.

—Jaime...—suspira. — Estai mojao'...

El otro se rie, sonriendo de medio lado, y le mira a los ojos por primera vez desde que llegó.

Sha no te quiero ~ ?

Al Nico la risa se le escapa sola, sin permiso. Lo abraza de nuevo, bufando.

—No, aweonao, que te voy a querer a vo'.

La risa del Jaime siempre ha tenido ese deje malicioso, calculador, como si estuviera haciendo constantemente algo malo y le divirtiera.

—Cabro culiao... —su voz es ronca, le pasa los brazos por la cintura. El Nico esta repentinamente rodeado de él y su risa y esa ropa mojada que se le pega al cuerpo como una segunda piel.

No puede resistirlo, lo besa de nuevo. Esta vez es mucho mas agresivo, mucha lengua y dientes y saliva y Jaime. Él. Sabe a cigarro. Sabe big time por sobre el sabor a lucky click que no se va nunca y sabe a hombre y a lluvia. Es sorprendente lo parecido y lo definitivamente diferente que es darle un beso al Jaime y a una mina. Por ejemplo, una mina nunca le ha apretado tan fuerte entre sus brazos ni le ha empujado contra ninguna puerta, como ahora. Nunca una mujer —ni hombre, ya que estamos— le habia tocado por sobre el pantalon con esa precisión que le hace blanquear los labios, ni han hecho eso con su lengua que... — Jaime.

Touch. Jaime/Nico Goth jaidefinichonWhere stories live. Discover now