Capítulo 17

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Al cabo de un rato llegamos al hospital, Rebeca se ha pasado todo el camino llorando, y al final se ha quedado dormida.

Entramos en el hospital y me dicen donde esta Inés.

-Rebe...despierta...ts ..

-¿q...que pasa?¿dónde estamos?

-Tranquila, ya hemos llegado al hospital.

Llegamos a la sala q nos han dicho y veo a mi hermano, con la mirada perdida y los ojos rojos, sentado en una silla.

-¡Hermano!–digo y seguidamente le abrazo.

-¡Jesús!–dice Rebeca y también le abraza.

-¿Qué ha pasado?–pregunto.

-Íbamos corriendo... y... Inés se cayó al suelo, pero no le dio tiempo a poner las manos y se dio un golpe en la cabeza, y se quedó inconsciente–dice mi hermano entre sollozos, y yo le abrazo

Nos quedamos un rato allí, esperando a que alguien venga, intentando animarnos los unos a los otros, aunque no da mucho resultado.

Llamo a María, y me dice que en media hora estará aquí.

-Inés, está bien, solo tiene un leve hematoma, pero esta en coma, no sabemos cuando despertará...–dice un médico que acaba de salir de la habitación de Inés.

-¿podemos pasar a verla?–pregunta Jesús, que ya se ha levantado.

-Sí, pero hay que llamar a sus padres, estarán preocupados–dice el médico.

-Ella... No tiene padres... Solo nos tiene a nosotros–dice Rebeca mirando al suelo.

-Ah lo siento–dice el médico–tiene suerte de teneros–dice el médico muy bajito, pero en un tono audible.

Nosotros sonreimos y el médico se va por el largo pasillo.

Pasamos los tres a la habitación.

*Narra Inés*

Me encuentro en un sitio familiar, no se que me ha pasado, pero si se donde estoy.

Aquel sitio no se me olvidará nunca, espero que no haya pasado algo tan malo como la última vez.

Intento abrir los ojos, pero no lo consigo.

Me encuentro en el lugar donde estábamos antes, veo como yo corro detrás de Jesús, y de repente me caigo al suelo, chillo y caigo inconsciente. Jesús va hacia mi, me coge en brazos y comienza a llorar.

Esa escena se repite sin parar, pero yo soy como una tercera persona no puedo participar en ella, yo veo todo pero nadie me ve.

De repente escucho unas voces muy conocidas, y la escena desaparece, ahora todo es negro.

-Mi pequeña...–es Dani, puedo sentir que no tiene esa sonrisa tan bonita en la cara, y que sus ojos están aguados–vas a salir de esta vale, tranquila, estoy aquí, estamos aquí, eres fuerte guapetona, te quiero–dice Dani, y me da un beso en la frente, mientras noto húmedo en mi frente.

A continuación viene Rebeca.

-Mi tooonta... venga te vas a poner bien, porque qué haría yo sin tus tonterías, sin nuestros piques... sin todas esas cosas, fea te quiero mucho, tienes que ponerte bien, p.. porque si no...–dice y se echa a llorar mientras me abraza–me muero.

Dani la abraza y la separa de mi consolandola .

Escucho como la puerta se abre, y una María con la voz rota saluda con un simple hola.

-Inés...no se que decir.. Tienes que salir de esta, para sacarnos a todos una sonrisa, lo necesito... te necesitamos , sin ti... todo es una mierda...te quiero mucho peque...–dice para después sentarse en una de las sillas de al lado de mi cama.

No puedo verles así. Nunca mejor dicho, ellos son mi todo, me han demostrado mucho, y no puedo perderles. Voy a luchar por salir adelante, cueste lo q cueste.

Nueva Vida Junto A Ellos (Gemelier)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora