Enseñame ha amarte [Teaching feeling].

No mires hacia atrás.

Llegamos a la casa, Sylvie se encontraba más tranquila, todavía me invade la furia, ¡como pudo ese maldito tratar de abusar de ella!, por suerte pude llegar a tiempo pero sinceramente no se como pude ser capaz de apaliarlo de esa manera dada mi situación actual; la fiebre bajo un poco gracias a los cuidados de Sylvie, cogí el botiquín que me lleve y lo revise, tiene unos antibióticos algo fuertes, creo que estos serán suficientes, sólo necesito tomarlos y guardar reposo unos días más aunque no creo que tenga tiempo, tengo que llevarme a Sylvie lejos de este pueblo y de estas personas, estaba tan sumergido en mi mismo que no escuche la primera vez que Sylvie me habló:

Sylvie: Amo...-habló con voz baja.

Doctor: Lo siento....dime ¿Qué ocurre Sylvie?.-dije de inmediato.

Sylvie: Amo... gracias por salvarme.-dijo con una voz increíblemente tímida.

Doctor: No tienes nada que agradecer, te dije que siempre te protegeria después de todo te amo.-acaricie su cabeza.

Sylvie: Yo también te amo mi querido amo.-sus mejillas se colorearon de un color rosa.

Sylvie se estiró hacia mí y yo la recibí entre mis brazos, rápidamente nuestras bocas se encontraron y se fundieron en un beso hasta que la necesidad de respirar nos detuvo.

Sylvie: Amo...me encantan tus besos.-dijo tocando sus pequeños labios.

Doctor: Y a mi me encanta todo de ti.....-me quedé sin habla unos segundos hasta que que decidí proseguir- Sylvie....vámonos, dejemos este lugar, se que será difícil empezar de nuevo por que tendremos mucho trabajo por delante y no conocemos a nadie pero....-no pude terminar.

Sylvie colocó su dedo índice en mis labios y con una tierna sonrisa me contestó:

Sylvie: Amo....no importa dónde vaya ni donde este, mientras usted esté conmigo yo seré muy feliz.-puso su mano en mi mejilla.

Sentí que una gran nostalgia invadía mi corazón, su caricia era tan cálida, tan auténtica y tan familiar que incluso me recordó a las caricias de mi madre, podía sentir el amor de alguien que te ama genuinamente, podía sentir el amor de alguien que te ama por lo que eres y no por lo que tienes, un amor sincero que no esconde nada tras bambalinas y que lo perdona todo, ese es el amor que siento en la palma de su mano y es el amor al que doy gracias a dios todos los días cada vez que veo su lindo rostro al despertar.

Sylvie: Amo, creo que tienes un poco de fiebre.-su mirada se volvió preocupada.

Puse mi propia mano sobre mi frente.

Doctor: Si creo que tienes razón, ¿Qué te parece si tomamos un baño juntos?.-le sugerí.

Sylvie: Mmmm -movía la cabeza de arriba abajo- me gustaría mucho, sería la primera vez que tomamos un baño juntos.-decía entusiasmada.

Me levanté de mi asiento a preparar todo, Sylvie intentó detenerme pero se lo impedí después de todo ya no me siento tan mal y eso es gracias a Sylvie así que quiero compensarla.

Llene la tina de agua tibia y preparé jabón, esponja, shampoo y toallas limpias, tomé los pequeños bancos de plástico y los coloque en su sintió.

Sylvie entró al baño totalmente desnuda, me quedé mirando unos segundos sin apartar mi mirada, sólo lo hice cuando vi a la chica voltear su rostro hacía a un lado completamente colorado, se que ya le he visto desnuda muchas veces pero es que no puedo evitarlo (definitivamente soy un pervertido).

Sylvie: A-amo...estoy lista.-dijo un poco nerviosa.

Doctor:.........eh...si, por favor toma asiento.-le señale su lugar.