Capítulo 42

53 1 0
                                    

Narra  Carlos:
Los rayos del sol dan de pleno contra mi rostro a pesar de llevar una gorra puesta. Un golpe en la cocina me indica que alguien más a parte de mi se ha despertado. Observo lo tranquila que está la pisicna tumbada desde el césped. Después de desvelarme decidí salir de la habitación para no despertar a Adriana y tomarme una maldita pastilla. Por esto odio beber, aunque no lo parezca.
-Adriana: Hola, bello durmiente -desvío la mirada apenas unos centímetros para encontrarme con Adriana acercándose hacia donde estoy- ¿estás más recuperado que ayer?
-Carlos: acabas de recuperarme del todo.
Se sienta a mi lado en el césped y con su mano acaricia algunos mechones de mi pelo, dejándome completamente relajado.
-Adriana: ¿recuerdas algo de anoche?
-Carlos: sólo el sabor de ese vodka barato.
La verdad era que a partir del momento en el que empecé a beber sin medida todo era borroso en mi mente.
-Adriana: así que después de eso...¿nada de nada?
-Carlos: ¿qué intentas decirme? ¿hice algo que deba saber?
-Adriana: ¿quieres saberlo todo? -frunzo el ceño asintiendo- Para empezar, nuestra especie de "relación " ya no es tan secreta. Me besaste delante de Miki y luego le echastes de la habitación -cuenta riendo-
Me llevo las manos a la cara intentando quitarme el agotamiento que llevo encima.
-Carlos: Bueno, tarde o temprano iba a saberse. ¿Algo más? -niega borrando la amplia sonrisa de su cara- ¿Segura?
-Adriana: me dijiste que me querías, y que, estuvieras o no borracho, lo ibas a seguir haciendo -admitió bajando la mirando y cesando sus caricias-
-Carlos: pues me alegro de habértelo dicho, porque no mentía -dijo cogiendome del mentón y levantando la cabeza-
-Adriana: creo que me fío más del Carlos borracho -bromea riendo-
-Carlos: encima que te digo cosas bonitas...
-Adriana: es broma, yo también te quiero un poquito.
-Carlos: ¿un poquito?
-Adriana: claro, todavía es pronto. No pidas más.
-Carlos: está bien... ¿Has desayunado?
-Adriana: todavía no.
-Carlos: pues vamos dentro que te voy a hacer las tortitas más ricas que hayas probado en tu vida -afirmo contundente levantandome de un salto-
Entramos a la cocina de la casa de Miki y cuando estamos buscando los ingredientes para hacer nuestro desayuno, un Miki adormilado aparece frotándose los ojos.
-Miki: ¡hombre! La parejita del año... pensaba que después de lo anoche no os ibais a poder mover.
-Carlos: ¿lo de anoche? Si te refieres a la borrachera, no es nada que un ibuprofeno no pueda resolver...
-Miki: ¿la borrachera? Me refiero a los gemidos y los gritos que se cortaron como a las 5 de la mañana. Espera...¿no fuisteis vosotros?

EfímerosWhere stories live. Discover now