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"Luhan, puedes decirle que lo siento, no fue mi intención avergonzarlo" Yifan realmente se sentía mal, no pensó que el menor lo tomará a mal.

"No te preocupes, yo iré a buscarlo. Por el momento mantente lejos y no molestes al pobre chico, está bien?" le pidió Luhan mientras enfilaba hacia los vestidores del personal.

Yifan asintió y regresó a su oficina, se sentó en su escritorio.

"El pequeño Tao" sonrió recordando al menor.

"El pequeño Tao" sonrió recordando al menor

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El tenía 15 años cuando la familia Huang se mudó al lado de su casa, su madre había preparado un pastel de manzana para darles la bienvenida al vecindario, y obligó a Yifan a acompañarla para saludarlos. La Sra. Huang les abrió la puerta, mientras un pequeño se asomaba detrás de ella, Tao era el niño mas tierno que Yifan hubiese visto, usaba una peineta con orejas de panda y sus ojeras naturales de verdad le hacían lucir como uno. La Sra. Huang y la Sra. Wu se pusieron a platicar y terminaron comiendo el pastel en el jardín. Mientras conversaban, Yifan podía sentir la mirada de Tao sobre él.

"Gege!" le llamó con una vocecita muy dulce "Se artes marciales!" le dijo tomando un bocado de su pedazo de pastel.

"Taozi aprendió wushu desde los 7 años, ya ganó su primera competencia al principio de este año" dijo la Sra. Huang llena de orgullo por su pequeño.

"Gege, quieres ver?" le preguntó a Yifan, quien asintió y los ojos de Tao brillaron emocionados. El pequeño se movió hacia la grama empezando a saltar tirando patadas y dando giros en el aire como todo un profesional para caer en un split perfecto. Tao se inclinó frente a él al terminar su pequeña rutina, Yifan le sonrió acercándose y revolviendo su cabello.

"Muy bien Tao, asombroso!" comentó Yifan, las mejillas del pequeño se pusieron rojas.

"Gracias Gege!" desde ese momento Tao busco estar cerca de Yifan, le llevaba galletas que horneaba junto a su madre, o para mostrarle algún nuevo movimiento de su clase de wushu, también estaba allí cuando Yifan invitaba a sus amigos del colegio, Tao observaba a los mayores jugar basquetbol en la cancha en el patio de Yifan, era muy pequeño y claro no le dejaban jugar, pero siempre animaba a su gege diciéndole que era el mejor, ganándose que el mayor se acercará ha revolver su cabello agradeciéndole el apoyo. Tao era como el hermanito que Yifan nunca tuvo, pero para el menor él era mucho más que un hermano mayor.

Una tarde, Tao enfermo con mucha fiebre, su madre le pidió a Yifan lo cuidara mientras ella iba a la farmacia. Yifan recordaba cómo su corazón se contrajo al ver al pequeño con los ojos llorosos, su cara roja y su frente muy caliente.

"Ge...ge" musitó apenas extendiendo su mano, Yifan se acercó y toma la mano del pequeño. "Tao, aquí estoy. Tu mamá fue por medicina, ya pronto estarás bien" le acercó un vaso con agua y le ayudó a beber para refrescarse un poco, y colocó una compresa fría en su frente.

MATCHMAKER LUHANWo Geschichten leben. Entdecke jetzt