6.-Crónicas de un embarazo

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Al principio de este libro ya había dicho que no solo me centraré en el NaruSasu; así que desde aquí aviso que este capítulo está más centrado en Karin y Suiguetsu, el embarazo y las correlaciones con sus familias. Sí, aparecen Naruto y Sasuke, y los otros personajes creando el trasfondo del capítulo, pero en sí, esto va del embarazo de Karin, el titulo lo dice, aunque la idea original se me distorsionó un poco mientras escribía, y creo que dejé algo muy personal aquí.

Si quieren leerlo, bueno, y si no, pues bien también.

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¿Qué podría estar provocando que Naruto se levante temprano un glorioso fin de semana de descanso? Y además de ese extraño suceso, esa adorable cara de emoción en su rostro mientras anda haciendo travesuras a costas de su dormida pareja. Sasuke está profundamente dormido según Naruto, como si sus manos traviesas acomodando una almohada dentro de la holgada camiseta de Sasuke no fuera suficiente para despertar a un Uchiha, pero dejemos que el emocionado rubio siga con lo suyo.

Con una suave risita se alejó de la cama y tomó la cámara de video que compró ayer por petición de su madre. La encendió y enfocó a su bello durmiente aguantando una risa. Carraspeó mientras los segundos avanzaban comiendo memoria.

-Aquí podemos observar a la futura madre descansando en su... nicho- enfocó la desordenada cama, cobijas por todo el rectángulo, menos sobre Sasuke. Luego fijó la cámara sobre la "pancita" de su novio -¿Sasuke, cuando vas a parir?- guió el lente hasta el rostro del moreno, y pegó un brinquito al ver esos ojos negros afilados clavados en su inocente persona -Ah, caray, ya se despertó este animal- rio alejándose unos pasos de la cama, sin dejar de grabar -Zona segura, zona segura.

Sasuke frunció el ceño mirándolo con los ojos entrecerrados y una sola pregunta en su mirada.

-¿Qué demonios haces?

-Documento tu embarazo- lo apuntó con diversión, apuntó a su pancita de algodón y tela.

Sasuke se sentó de golpe sacándose la almohada y aventándosela al rubio idiota que empezó a reír.

-¡Acabas de matar a nuestro hijo!- lo apuntó aun riéndose, buscando esa fea palabra que usan y que anda creando tanta polémica en las redes -¡Aborto!- lo volvió a apuntar sin soltar la cámara -¿Qué culpa tenía el niño, Sasuke?- lloriqueó con falsedad.

-Ese es un mal chiste- se sentó en la orilla de la cama, suspirando para reunir paciencia a esas horas de la mañana -¿De dónde sacaste la cámara?

-La compré ayer, mamá me la encargó- buscó otro ángulo, rodeando con cautela la cama -Di hola, amorcito.

-Tu abuela- bostezó.

-Oye, respétala, que aún está viva esa señora.

-En serio, Naruto ¿Qué haces?- se le está antojando aventarle una pantufla la próxima vez.

-Una película familiar- respondió contento. Sasuke levantó una ceja -Vamos a documentar el embarazo de Karin... y lo que siga después de eso. El parto le toca a Suiguetsu, yo ni loco entro ahí- negó efusivo imaginando gritos y sangre.

Sasuke sonrió por un segundo, todavía medio adormilado. Sacudió la cabeza para que el sueño no se lo lleve contra la cama de nuevo. Volvió a ver a Naruto estrechando los ojos.

-Hey, idiota ¿No te estas equivocando de protagonista?

-Nop- su diversión volvió, y Sasuke lo miró con sospecha de nuevo -Esto servirá para mostrarle a nuestros hijos donde vivían antes de nacer.

Una vida juntos.Where stories live. Discover now