A la mañana siguiente es Jeonghan quien lo despierta, quizás sean las ocho de la mañana o más tarde, Minghao no sabe porque durmió más que otros días. Para cuando se levanta y recoge todo dentro del pequeño lugar puede notar cierto silencio incomodo, no es Jeonghan, Jeonghan a pesar de estar callado siempre mantiene una especie de aura tranquila y hogareña.

—¿algo te incomoda?— Le pregunta Jeonghan. —Seungkwan y Hansol están jugando cerca del rio con los demás.

Minghao gira hacía su mayor y puede reconocer cierta diferencia en él. Quizás sea su piel más brillante y ojos iluminados lo que hacen ver a Jeonghan más feliz de lo normal, o quizás sea su cabello rubio reluciendo con el sol de la mañana. Es difícil de explicar, es como si el chico fuera más radiante. Minghao entrecierra los ojos.

—¿engordaste?— Pregunta de golpe a lo que su mayor suelta una pequeña carcajada.

—¿Qué clase de pregunta es esa?

—Déjame ser más directo. ¿Cuánto tiempo de embarazo tienes?

Jeonghan de repente suelta todo lo que estaba tomando y se asoma un poco afuera de la carpa antes de regresar con Minghao y poner una mano sobre su boca. El mayor le hace una señal y una mueca de disgusto que confirman todas las sospechas de Minghao.

Cuando su madre estaba embarazada ella se veía más radiante, podía iluminar un cuarto entero con solo entrar en él. Su piel y sus ojos eran tan limpios y su cabello sedoso que Minghao pudo verla como la mujer más hermosa del mundo. Ella le explicó en ese entonces que se veía de tal manera porque el embarazo era dar luz, el bebé daba una belleza singular fácil de distinguir, pero que todos solían ignorar.

—¿Cómo lo supiste? ¿Woozi lo sabe?— Minghao niega. —Ah... por favor no le digas, no tiene que enterarse.

Minghao consigue quitarse la mano de Jeonghan.

—¿Por qué?

—¿aun preguntas porque? Estamos en un refugio con comida limitada y con la amenaza constante de ser atrapados, sufrimos de frio y falta de medicamento. Es un pésimo momento para traer vida al mundo.

—¿y antes era mejor?

—Con Seungkwan fue distinto, al menos ahí tenía un departamento. Ahora no tenemos nada.

—¿de quién es el bebé?

Jeonghan alza la mirada como si no entendiera la pregunta.

—supongo que mio... Digo, está dentro de mi.

—¿pero quién lo puso ahí?

—¿Dios?— Minghao casi se golpea el rostro ante la respuesta de Jeonghan. —No se lo digas a Woozi, ni a nadie. Esto se queda entre nosotros ¿está bien?

Minghao alza la mirada con preocupación ¿desde cuando Jeonghan ocultaba las cosas? Él solía enfrentarlas, ir directo al punto aun cuando significaba discutir con Jihoon ¿Por qué ahora parecía asustadizo? ¿Por qué ocultar algo tan importante como eso?... Una amarga idea vino a la mente de Minghao y aunque intentó apartarla esta se asentó con fuerza insistiéndole una y otra vez. Luego llegó otra mucho peor.

—¿El bebé es de alguien del refugio?— Jeonghan asiente. —¿lo conocemos?— Jeonghan volvió a asentir. Hay un largo silencio antes de la siguiente pregunta. —¿es de Jihoon?— De nuevo un silencio pesado y lento. Jeonghan niega. —¿entonces de quién es?

—Minghao, es mejor que no hablemos más de esto, por favor. No se lo cuentes a nadie. Promete que no lo harás.

Minghao suspira y gira para huir de la situación, no quiere prometer nada, no quiere ni siquiera estar envuelto en esa situación, es algo malo, quizás, algo que le revuelve el estómago trayendo a él un sentimiento conocido. Es un Deja vú en el que recuerda haber deseado que cierto aparato funcionase bien, ahora él solo esperaba que Jeonghan estuviera equivocado, que en realidad el bebé fuera de Woozi y ellos dos formaran aquella familia que dejaron en pausa antes de empezarla.

INMUNDO [JunHao][M-PREG]Where stories live. Discover now