La Novata - Suayeon (TERMINADA)

8: "¿Se preocupó por mi?"

-Y entonces perdimos al ladrón, eso fue lo que pasó -BM acababa de contarle lo que había sucedido en aquella persecución.

-¿Realmente fuiste tan idiota como para no revisar si tenía un arma debajo? -Siyeon estaba enojada con la irresponsabilidad de su compañero.

-Discúlpeme, capitana, yo no... -lo interrumpió.

-Te lo advierto, BM, si Bora llega a morir ahí adentro lo pagarás muy caro.

-¿Familiares de Kim Bora? -preguntó una enfermera. Automáticamente Siyeon levantó la mirada- Se encuentra bastante mejor, por suerte, pero tendrá que estar algunos días en cama.

-¿Puedo pasar a verla?

-Sí, pero no haga mucho escándalo, la paciente se encuentra durmiendo.

Al entrar a la no tan amplia habitación médica, Siyeon vio a una Kim Bora respirando dificultosamente, medio despeinada y con una pierna vendada. Tomó una silla que había ahí y se sentó al lado de la camilla de la paciente.

-Bora... -susurró la capitana- Tienes que ser fuerte, eres una excelente cadete y no nos puedes dejar así... -la menor tomó su mano cuidadosamente.

En ese momento, SuA comenzó a abrir los ojos lentamente, lo que sobresaltó un poco a Siyeon. Soltó su mano al sentirse avergonzada de lo que acababa de decir.

-¿Capitana? -habló Bora con una voz ronca- ¿Qué hace aquí? -preguntó un poco confundida al ver a Siyeon sentada al lado suyo.

-Vine a ver como estabas, Bora.

-¿Realmente se preocupó por mi?

Siyeon, colorada al ver como SuA la miraba, rodó los ojos y asintió.

-Creí que no sería capaz...

-¿Capaz de qué? -interrumpió.

-De preocuparse por alguno de sus cadetes, quiero decir, usted parece una persona super fría y reservada, eso digo.

-Claramente no me conoces, Bora, necesito mantener esa imagen para intimidar a todos, no por algo soy la lider de ese cuartel.

-Oh, ya veo, discúlpeme por el atrevimiento.

-No te disculpes, es normal pensar eso de mi, casi todos en el cuartel lo hacen -Siyeon bajó su mirada con algo de tristeza.

-Kim Bora -entró una enfermera- Lamento decirte que las visitas deben irse, tienes que descansar.

-De acuerdo -habló Siyeon un poco decepcionada porque en el fondo quería seguir hablando con la novata.

Involuntariamente, Siyeon depositó una pequeña caricia en la mejilla de la paciente, logrando que ésta se sonrojara.